{MEXICAIN 283}

{F:a}

 

{MEXICAIN 283}

                       

 

 

                                                     Manuscrit

                                              Un cabier. un folio

                                                        31 pages.

 

 

 

 

 

                                 Documento diversus la novelle es pagne

 

 

 

                                                                                    No. 283

 

                                                    Volume se 76 fevillets

6                        1898

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-01r}                                                                                                            1

                                               

Noticias  de México y N[uev]a Esp[añ]a deducidas de diversos libros,

y papeles.

 

Noticias deducidas de la obra intitulada: exaltación de la Divina Misericort-

día en la milagrosa renovación de la soberana imagen de X[ris]pto crucificado q[u]e se

venera en  la iglesia del conv[en] to de S[a]n José de Carmelitas Descalzos de esta ciudad.

de México p[o]r el D[octo]r Alonso Alberto de Velasco. México año de 1699.

 

{sello: Colección P. Reg. Goupil a. Paris. No. 283}

 

Preve noticia de la milagrosa imagen  del S[an]to Cristo

                                        de S[an]ta Teresa.

 

                 Alonso Villaseca entre varias imágenes q[ue] trajo a N[uev]a España en 1545

fue un cristo crucificado q[u]e coloco en la iglesia del  R[ea]l de Minas q[u]e llaman

de Plomo Pobre dystantes de México hacia el norte veinte y seis leguas  y pertene-

cientes a dicho D[o]n Alonso y de sus herederos era conocida  esta imagen p[o]r los nom-

bres del S[an]to Cristo de Simapan, del Cordonal  de las minas de Plomo  Pobre,

de las minas de Guerrero, y g[ene]ralm[en]te p[o]r de  Ismiquilpan , p[o]r razon  de los di-

veros pueblos y lugares de su cercanía. como esta imagen  era hueca y

borrada en papel y  engrudo, era indispensable  q[u]e se atendiere demasiado

de las injurias del tiempo. en efecto el año de 1615 y {60} de su  colocación

en q[u]e el S[eño]r Arzobispo de México D[o]n Juan Perez de la Cerna hiso vista de

estos parages, estaba tan dilaverada  y detenida  q[u]e p[o]r  quitar de la vista de

los fieles un objeto de irreverencia mando p[o]r auto /el Arzobispo/ q[u]e des-

tosada la imagen {se} enterrase con el primer  di[fun]to grande.corrieron cin-

co  a[ño]s sin q[u]e falleciere alguna persona grande en el pueblo, y desde este tiempo

hasta el año de {1523} se oyeron frequentem[en]te en el templo gol-

pes extraordinarios, gemidos dolorosos, repiques de campanas, procesio-

nes de penitentes, de q[u]e fueron testigos los vecinos, y aun el mismo cura

q[u]e rehusaba dar credito a semejantes novedades. sacarele una ves en

procesión con resistencia del cura p[ar]a implorar la lluvia y en el  regre-

so de la procesión  fue tanta la lluvia estando antes el cielo mui lim-

pio q[u]e se mojaron todos g[ene]ralm[en]te sin q[u]e la lluvia huviere pasado del

recinto q{u]e la imploraba y necesitaba. Repetiense estos sucesos con asombro

g[ene]ral quando {el} miércoles 19 de mayo de {1623} vispera de la asencion mando

el cura D[o]n Pedro  Zsmora de algunas señales extraordinrias paso a reis-

trar la iglesia {a las quatro de la tarde}con una multitud ni al cristo q[u}e en la mañana de este

dia se la havia encontrado en la misma diformidad q[u]e en el anterior

se hallo con asombro enteram[en]te reconocido, su rostro perfecto, su color

vivo y claro, sus ojos entreabiertos y luminosos y sus partes todas en

la formación de un hombre el mas perfecto. Advirtiere tambien algu-

na agua en su cuerpo q[u]e fue un sudor copioso y duro hasta las o-

ocho de la mañana de dia siguiente habiéndose procurado enjugar con

muchos paños y algodones y notándose q[u]e estando la imagen  con al-

gun polvo este jamas se confundio con el  agua. repitiere este mis-

mo unas tres o quatro v[ece]s alguna ves acompañado de abundan-

te sangre y haviendo precedido unos movimien{tos} extraordinarios

en la imagen a vista de todo el pueblo resultando de uno de  es-

tos una abertura en el costado. el bueno del cura, conjuro entre

tantas maravillas y sin deliberación, encargó a sus felgreses el  ma-

yor secreto hasta la total averiguación del negocio, p[ar]a este medio

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-01v.}

 

mui contra su voluntad, lo fue p[ar]a q[u]e se difundiere mas prontam[en]te la

noticia y llegare a México, donde corresponde p[o]r el arzobispo, q[u]e in-

tervenia en estos hechos algunas estratagenia del cura,  despacho a

un visitador con su notario y algunos otros oficiales de la curia.

Lo primero q[u]e notaron estos pesquisidores fue el no poder soste-

nerla vista fija en la imagen sin terror espanto: fueron tambien

testigos de otros hechos admirables: de una luz extraordinaria q[u]er

salia del cuerpo de Cristo iluminando la piesa q[u]e estaba  con

mas claridad  q[u]e lo harian cincuenta hachas, de la repentina

sanidad de un hombre moribundo, cuia edad pasaba de cien

a[ño]s{,} de la pronta expedición de los mimbros{,} de una tullida de

nacim[ien]to{,} del subito desmayo y aturdim[ien]to de un hombre fuer-

te y anomoso, q[u]e  razonando de un valor se puso a orar en

presencia de la imagen{,} del peso extraordinario q[u]e se expe-

rim[en]to en la imagen al quererla levantar dentro del cajon

en q[u]e la havian encerrado p[ar]a conducirla a México, y del

frequente y copioso sudor ya de sangre ya de agua sola

en q[u]e no podia intervenir {el} menor artificio. tratare de conducir-

lo a México, interviniendo la fuerza secular en atajar {los}

motines, q[u]e p[o]r esta causa se resucitaron en el pueblo, y desp[ue]s

de haverse colocado en la capilla del palacio arzobispal, paso 

a la iglesia de monjas carmelitas donde hoi se le venera con 

el m[ay]or culto. todos estos estos {sic} hechos q[u]e se refieren aquí compendio-

sam[en]se te hayan  autenticados con el ultimo grado de probanza,

 y declarados p[o]r maravollosos.

D[o]n Alonso Villaseca primer dueño de esta imagen , fue de Ana

Campre, y entre las pruebas q[u]e dio de su  piedad fué una el haver

fundado y esta[bleci]do el conv[en]to de S[a]n Pedro y S[a]n Pablo de los  Jesui-

tas de México.

El Arzobispo de México D[o]n Juan Perez de la Cerna de q[uie]n {se} habla

al principio de esta relacion es memorable p[o]r sus tragicoa aconteci-

m[ien]tos en esta capital, prevenidos de la vigorosa defensa q[u]e hiso de la

inmunidad eclesiástica en octubre de {1623}. D[o]n Melchor Peres de Va-

raes p[ar]a Alcalde M[ay]or de Metepec, p[o]r no se q[u]e motivos q[u]e le obligaban á

tomar avito religioso en el con[ven]to m[ay]or de dominicos, donde el Mar-

ques de Galbes q[u]e gobernaba entonces de virrey, le puso de guar-

dia seis soldados. ofendido el arzobispo tanto del hecho, como

de la repulsa de sus demandas expidio censuras, no aprovechan-

do las quales paso entredicho  g{ene]ral en todas la siglesias de México.

teniendo este partido el mismo numero q[u]e el anterior se hiso

conducir en silla de manos á la sala de audiencia don-

de no siendo admitido su consulta del virrey y forma-

do acuerdo inmediatam[en]te p[o]r este se le intimaron

 

 

{283-02r}                                                                                                             2

 

prontamente tres autos (p[o]r no querer  sobreser en sus  pretensiones)

q[u]e tuvieron p[o]r efecto multarlo en 4 ducados privarlo de tempo-

ralidades y estraverlo del reino como se verifico conduciéndolo

de or[de]n del virrey un alcalde de corte y {el} alguacil m[ay]or

en una carrosa  hasta  S{a]n Juan de Ulua detenido el arzobis-

po en San Juan teotihuacan ocho  leg[ua}s distante de México,

tomando consigo el sacram[en]to P[ar]a librarse de violencia, mando

publicar en México la {Cenacion á divines q[u]e se verifico lu-

nes 15 de 1624. este suceso exacerbo sobremanera al pueblo

ya indispuesto p[ar]a las vexaciones q[u]e recibia su pastor:el mo-

tin fue g[ene]ral , quemaronse las carceles y el palacio, saqueo-

se la habitación del virrei y de su asesor y el virrei teme-

roso de perecer entre la furia de la plebe se refugio en

el conv[en]to de frailes franciscanos.- el pueblo no se sosegó hasta

ver libres a tres oidores q[u]e se havian arrestado en pala-

cio p[o]r haverse juntado a revocar las anteriores determina-

ciones del virrei, las quales carecian de las formalidades

competentes. hasta ser libres de la misma prisión a v[uestro]s abo-

gados y relatores, y ver p[o]r fin a su prelado conducido co-

mo en triunfo á México con un repique g[ene]ral de cam-

panas. el autor lib[ro] C[apitulo] 13.

El autor de esta obra citando a S[a]n Joaquín Gregorio Huroneme en

el lib[ro] 1 de su historia cap[itulo] 21 y a S[a]n Anselmo indefinidam[en]te dice

q[u]e indignados los pontífices y escribas de Judea contra José de Ari-

motea p[o]r el sepulcro q[u]e havia dado al salvador, lo encerraron en

su obscuro calabozo custodiado p[o]r ellos mismos en el dia de

la resurrección levantare p[o]r si mismo el edificio y un angel

saco a José de la prisión. No satisfecha con esto la rabia

de los pontífices lo enterraron vivo en las murallas de Jerusa-

len, donde se le hallo de esta manera quarenta a[ño]s desp[ue]s

en la toma q{ue}miro  fito{sic}de esta ciudad.

                           {Inundación g[ene]ral de México en 1629}.

El dia 25 de septiembre de {1629 }sobrevino una inundación g[ene]ral que anego toda

la gran ciudad de México, cubriendo todas sus calles y plazas de agua, q[u]e en la

menor altura era de dos v[osotro]s arruinose la m[ay]or y mejor parte de la ciudad, con

muerte de m[a]s habitantes . Fue preciso usar de canoas p[ar]a comunicarse mutua-

m[en]te y conducir los alimentos a las casas: de la mima manera se conducia

el viatico, y p[ar]a q[u]e los fieles oyesen misa  desde las ventanas de sus casas, se

edificaron a ciertas distancias altares mui elevados. {En} esta  inundación ocacio-

nada p[o]r el rehalse de las lagunas q{ue} rompieron todas las albarradas  cau-

sadas y presas y q[u]e deio p[o]r espacio de quatro a[ño]s se distinguio sobre ma-

nera la piedad del Arzobispo D[o]n Francisco Monso, q[u]e aliviaba perso-

nalm[en]te a los habitantes.

Exterminio de judios y herejes del reino de N[uev]a Esp[añ]a.

En el  primer siglo del descubrim[ien]to de esta America ocurrieron á esta A-

merica en abundancia m[a]s judios los q[u]e establecidos aquí y disfrasados

con el  exterior de católicos tuvieron la facilidad de nomicar {sic}su secta,

propagarla, y fabricarse algunas sinagogas: ya esta gente tenia con-

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-02v.}

 

tra si v[uestra]s cedulas de Phelipe 2 y especialm[en]te una de Felipe 5 en {1619} q[u]e

se hallan recopiladas en las leyes de Indias: po{r} el tribunal de la inqui-

sicion  formidable enemigo de esta familia fue el q[u]e la extinguio del

todo en los autos tenidos en 1590.596.1601.625.635.646.647.

648 y los mas celebres de 649 y 659 en q[u]e fueron quemados algunos

de ellos. Este tribunal extiende su jurisdicción en el continente

p[o]r mas de 900 leg[ua]s y fuera del abrasa el gobierno de Manila.

                              Fundación del conv[en]to de monjas carmelitas

                                                            {de México}.

El s[eño]r D[o]n Juan Perez de la Cerna libre p[o]r intercesion de N[uestr]a S[eñor]a del

Carmen de una furiosa tempestad q[u]e sufrio en un viage de Veracruz

determinó en reconocim[ien]to fundar un conv[en]to {de}monjas carmelitas p[o]r lo

qual solicito bula de Paulo V y cedula de Felipe 3. Este conv[en]to tiene

p[o]r patron al arzobispo, es mui edificante y compuesto de las s[eñor]as mas

nobles de México.

                                            {Epidemia}

P[o]r la esterilidad y de los campos y falta de bastim[en]tos sufrio México

una cruel epidemia q[u]e duro desde el año 1692 hasta el 96 la  mor-

tandad fue crecida sin q[u]e valieren los mayores {recursos}, y  las mas fervo-

rosas plegarias:hasta q[u]e hecha una procesión con el s[eño]r de S[an}ta Teresa

y concluido un famoso novenario en la catedral seso esta des-

gracia en enero de {87}.

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Noticias deducidas de la obra en folio intitulada :{Escudo de Armas}

de México: celestial protección de esta nobilísima ciudad de la N[uev]a

Esp[añ]a y de casi todo el n[uev]o mundo, Maria S[antisi]ma en su portentosa i-

magen del mexicano Guadalupe, milagrosam[en]te aparecida en

el palacio arzobispal el año de 1534 y jurada su pr[incip]al patrona

el pasado de {1737} en la angustia q[u]e ocacionó la penitencia q[u]e

labada con m[ay]or rigor en los indios mitigo sus ardores al  abu-

so {de tanta sombra}. Obra escrita p[o]r el Presbitero D[o]n Cayetano

Cabrera y Quintero de or[de]n del Arzob[is]po D[o]n Juan Antonio de Veia-

rion y Eguiarreta, impresa p[o]r la ciudad y dedicada al Rey D[o]n

Fernando {6º} en México {1746.}

En la dedicatoria hace mencion al autor de la armada en plaso q[u]e en 1742

invadio a Cartagena y  amenaso a las cortes de esta America.

y de una real or[de]n dada en 22 de octubre de 1743 en q[u]e el Rei D[o]n Fernan-

do se declara protector y .patron del santuario de Guadalupe.

La aprob[acio]n del Reb[eren]do y S[eño]r D[o]n Juan Antonio Fabrega Rubio: esta oportunam[en]te erudi-

ta y aunq{ue} su estilo no esta mui al gusto del siglo, esta con todo agradable atili-

die q[u]e los indios llamaban a la epidemia:{matlazahuatl}.

2ª del  s[eño]r D[o]n  Josef de Mercado Abog[ad]o de los R[eale]s Consejos y de la Audiencia de M[éxic]o pre-

tend[ien]do de la Puebla. Obra mui erudita aunq[u]e no mui acomodado su lenguaje al gus-

to del siglo.

Refiere q[u]e el autor del {escudo} havia escrito antes otra obra: {Indice Oretio}, vida

de S[a]n  Francisco la q[u]e celebra.

Ente de mucha erudición trahe estos dos pasajes dignos de apuntarse.

Sure piget port tale deus quid feserit ante.

quam vidi rates est nane mihi none manum martical 166.8 epig. 30

Suit moris antiqui cos qui rel singularum laudes vel urbiam escriptura aut

honoribus aub pecunia ornare: nos cristo temporibus ut alia ipeciore et egre

cia, ita noc in grimis eyoloucyt. plin.lum.lib[ro]. lib[ro] {sic} 5 e[scri]pt[o] 31.

 

            

 

 

 

                 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

         

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-03r.}                                                                                                                      3

 

Defiende brevem{en]te aplicación y conocim[ien]tos de los americanos contra D[o]n Grego-

rio Mayany y Siscar contra el Dean de Alicante D[o}n Man[ue]l Marti y contra

D[o]n Nicolas Antonio

Cita al americano D[o]n Carlos de Siguensa y Góngora q[u]e escribió grandem[en]te

sobre {origen de los indios}:obra q[u]e  con este titulo dio a luz  S[eño]r Grego-

rio García, dominicano con curiosas adiciones.

Cita tambien a Leon Pinelo q[u]e  escribio una {Biblioteca Indiana]

3ªAp[rovacio]n del D[ea]n D[o]n Fran[cis]co Ximenes Caro Canonigo de México este aprobante es euro-

peo su estilo es decente, natural y fluido. elogia grandem[en]te la obra p[ro]poni-

endo en especial atención en el autor lo recomienda, testificando con todo

el publico, como dueño de una erudición basta y universal.

                     {Prologo}

En el se disculpa el autor de la tardanza prevenida de las personas a q[u]e se debio

ocurrir p[o]r algunos documentos.

El pliego de papel estaba a real en este tiempo.

Las  prensas estuvieron entonces seis meses sin aros.

Tardaron los impresores tres años en la impresión de esta obra.

Adeo ut satis constet non invenian Inter. Scripta nonminam, xoxius /.../

...historiam legitiman et ómnibus nameis sucis absolutam. Bacon de aug.

Present[tacion] lib[ro] 2.C[apitulo].5.

El autor se disculpa sobre la claridad y fuerza de algunas de sus impug-

naciones en la obra.

                                                             Lib[ro] 1º

                                                        C[apitulo].1º

Año de {594} y 28 del Emperad[o]r justiniano en Europa y Asia una

terrible pesteabrazo casi todo el orbe: en solo Constantinopla  morian

todos  los dias cinco mil,y huvo m[a]s dias de dies mil.

Los mexicanos antiguos llamaban a la peste Cocoliztli.

La m[ay]or pestilencia q[u]e ha sufrido la N[uev]a Esp[añ]a desp[ue]s de la conquista fue la

de 1576 . Dexose ver entonces un iris circular de colores inflamados y san-

grientos, q[u]e duro cinco horas.

                                                       C[apitulo] 2.

El V[enerabl]e P[adr]e Fr[ay] Bernardino Saguhun, uno de los doce religiosos francisca-

nos q[u]e plantaron la fe en estos reinos y pasaron a el en 1529, escribio

una obra intitulada: {de las cosas divinas y human as, políticas y naturales

de este reino}: en doce libros. La qual paso a Esp[añ]a y alli va ha recorrer

el sitio de México de {1521} en los r[eino]s de Cristoval Sandoval q[u]e estaban en

el lugar {Tepeaquilla}, el mismo donde esta hoi el santuario de Guadalupe

se dexo ver la s[eñor]a de los españoles en la misma forma q[u]e aparecio en {1531}

y añade lo sig[uien]te, quando los mexicanos y {tlaltelulcanos} estaban mui an-

gustiados p[o}r verse acosados p[o]r todas p[ar]tes de sus enemigos, y no tenian posibili-

dad de huir ni resistirlos.dicen q[u]e un dia a puertas del sol comenzo a

llover una mollina de agua, que tardo como dos horas; y desp[ue]s de esta

mollina sucedió luego un torbellino de fuego como sangre embuelto

en brasas y sentellas, q[u]e partio de hacia {Tepeyacac}, y fue haviendo {ocu}-

rrido acia donde estaban acorralados los mexicanos y {tlaltelulca}-

nos y dio una b[uel]ta p[o]r enrrededor de ellos, y no dicen si los empecio al-

go, sino q[u]e habiendo dado aquella b[uel]ta se entró p[o]r la laguna adelan-

te y alli desaparecio de la vista  de este remolino y fuego quedaron

ellos mui espantados y alli comenzaron a fabricar el negocio de ren-

dirse a los españoles.

Se refiere tambien q[u]e la misma Virg[e]n S[antisi]ma se presento á los mexicanos

cuyo num[er]o era infinito en la laguna y a mas de conmover el aire y agua

cortado ellos, les arrojaba polvo á los ojos, cuio impulso y herida eran

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-3v.}

 

sumam{en]te dolorosas. El s[eño]r D[o]n alonso de Cuevas Dávalos, Dean de México.

Obispo de Oaxaca comunico a un indio viejo q[u]e le decia: Yo aunq[ue] indigno

vi a esta s[eñor]a yo la vi q[u]e nos echaba tierra a los ojos.

S[eño]r Diego Duran dominico escribió dos libros de antigüedades indias, y

de historia q[u]e p[o]r su muerte seg[u]n refiere el Ill[ustrisi]mo Padilla no se dieron

a leer. El P[adre] José Acosta en su philosophia natural y moral incerto

mucho de ellos, los quales se fueron comunicados p[o]r el P[adre] Juan Tovar, q[u]e

vivio en México.

S[eño]r Luis Aennepin franciscano, escribió en frances una historia de la

Luisiana q[u]e se tradujo al italiano, y se publico en Polonia en 1686, se-

gun refiere este autor los indios de la Luisiana refieren su origen a

una mujer, q[u]e haviendo baxado del cielo,y no teniendo donde fixar

el pie p[o]r ester la tierra inundada de agua, p[o}r deliberación de los

peces presentole su espalda la tortura, á la qual  se agregaron desp[ues}

muchos peces del mar, q[u]e unidos entre si formaron este gran  con-

tinente. Esta mujer apoderada de la tristesa de su soledad, y entregada al

sueño fue fecundada p[o]r un espiritu q[u]e bajo del cielo del qual pa-

rió p[o]r el costado dos varones de genios encontrados de los quales el uno

se refugio al cielo desde donde embia los truenos y relámpagos, y el

otro casó con una hem[an]a del cuio matrimonio viene la estirpe de

los americanos.

La un [Tepeyacac] q[u]e dieron los mexicanos al cerro de Guadalupe, sig-

nifica {frente de peñascos}, ó naris de los montes}

                       Monte Tepeyacao nomine quamque vocat.

                       {México est lapidium frons} et idiomate y entis.

Ne dicam. {Nares montium}; citrumq[u]e conat.

y efectivam[en]te en este cerro una punta o creston de piedra q[u]e sobresale al

llano o laguna.

En este cerro tenian los gentiles un adoratorio donde quemaban incienso

á una deidad q[u]e llamaban: Tonanbzin, Tonantzin o Teotenantzin,

esto es {madre de las gentes, o madre de los dioses}.

                                   {Aparicion de N[uestr]a S[eñor]a de Guadalupe}.

Juan Diego, indio pobre de edad de cincuenta y siete a[ño]s y a los siete

de su bautismo anotando en la madrugada del 9 de diciembre del

año de 1534 (diez a[ño]s 4 m[ese]s desp[ue]s de la conquista) el cerro de {tepeya

cac} p[ar]a concurrir a la doctrina en la parroquia de Tlaltelulco, fue sor-

prendido de una dulce musica q[u]e advirtió en el mismo cerro. siguien-

do hacia este lugar su vista  se dio con Maria S[anti]s[i]ma q[uie]n llamándolo

p[o]r su propio nombre, y hablándole en su lengua, le dio a entender 

q[u]e ella era la protectora de naturales y extranjeros, q[u]e queria se le

hiciere alli un templo, y q[u]e fue a darle p[ar]te de ello al ob[ïs]po, q[u]e lo era

el s[eño]r D[o]n Frai Juan de Zumarraga, franciscano. obedecio el indio

al mandato q[uie]n gasto todo el dia {en} lograr la audiencia del ob[is]po,

sin haver sido creido. Regresando p[o]r el mismo lugar á la tarde en-

contró a la Virgen S[anti]s[i]ma a q[uie]n  propuso destinarse p[ar]a  semejante comi-

sion a otro mas digno, y q[u]e mereciere mas asenso que el; la Virgen

insistio en q[u]e el fuere el mensajero, y q[u]e reiterase la diligencia al

dia sig[uien]te. Al domingo sig[uien]te desp[ue]s de haver oido misa en {Tlatelolco}

paso a informar al obispo del mismo suceso, el q[u]e habiéndole 

hecho diversas pret[un]tas le pidio señales de la verdad de su  lega-

cion, u envio tras del algunos de sus familiares p[ar]a q[u]e notaren

con q[uie]n hablaba. desaparecido el indio a vista de ellos en el ce-

rro de {Tepeyac}, lo tuvieron p[o]r un hechicero, e informaron

de ello al obispo. entretanto Juan Diego, logrando tercera

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-4r.}                                                                                                                4

 

aparicion de la virgen, le dio la contestación del obispo y prevista

p[o]r la misma s[eñor]a p[ar]a  recivir las señas al dia sig[uien]te el buen Juan Die-

go, haviendo entrado malam[en]te enfermo a su tio Juan Bernar-

dino y siendo despachado p[ar]a solicitante el viatico, p[ar]a entrar el en-

cuentro de la s[eñor]a y practicar brevem[en]te su diligencia trato de

extraviar el camino,y dirigirse p[o]r otra p[ar]te a Tlatelolco, ni lo

comenzaba a verificar en el dia destinado p[ar]a recivir las señas,

q[uan]do haciendo presente la s[eñor]a y avergonzado de su desobedien-

cia, se disculpo con el motivo de ella. La virgen entonces le ase-

guro de la salud de su tio, y mando subiere al cerro p[ar]a tomar

en su capa las flores q[u]e encontrare. Juan Diego havia pa-

sado el cerro sin notar flor alguna, ni el frio del tiempo

las permitia, sin embargo obedeciendo prontam[en]te se hallo con

un jardín hermoso delqual tomo q[uan]tas flores pudo, y recogi-

das en su {tilma} las presento a la Virgen q[uie]n lo esperó bajo

de un arbol. La s[eñor]a tomo las flores y las acomodo sobre la

misma {tilma} mandándolo q[u}e las llevase alob[is]po mismo.

Los familiares procuraron con alguna violencia ver lo q[u]e Juan

Diego llevaba en la manta p[o]r el obediente al mandato defen-

dio q[uan]to pudo el obsequio y aunq[u]e en los esfuerzos de aquellos se-

descubrio algo solo fueron unas flores pintadas. Al fin {es} presen-

tado al obispo da su mensaje, abre su tilma, caen las flo-

res y {se} descubre la hermosísima imagen de Guadalupe, perfec-

tam[en]te pintada, a cuia vista se portaron todos los asistentes

llenos de asombro. quitosela a Juan Diego a Juan diego {sic} la til-

ma, y se coloco en la capilla del {obispo}{ cuatro líneas tachadas} {cocidos a lo largo con

algodón}{sic}

Esta {tilma}, o manta es de hilos gruesos, y mas cuerdas q[u]e los del cañamazo

de Europa, mal torcidos, mal texidos y su trensado tan ralo q[u}e se ven de

una p[ar]te a otra los bultos.algunos creen q[u]e su material es el bagazo

de ciertas palmas. de q[u]e hacian capas los indios, otros  q[u]e su hilo es del

celebre {maguei}. se ha tocado veridicam[en]te este lienzo,y se ha  hallado

no tan aspero, rudo y erisado al reverso, como blando, flexible, y sua-

ve como la seda, p[o]r el hai este lienso esta compuesto de dos trosos {cuatro lineas tachadas simulando el tegido de la tilma}

La longitud de la imagen, o de la pintura es de mas de dos v[ece]s castella-

nas, y su latitud de mas de una: el paño es de siete palmos, menos algu-

nos dedos. el manto es azul. y tiene quarenta y seis estrellas, es franjeado

de oro en toda su circunferencia: dexa ver p[ar]te del pelo, q[u]e es graciosam[en]te

negro, el rostro es hermoso, y mui honesto, su color de trigo, p[o]r q[u]e tira al-

go a blanco, su frente serena, las cejas arqueadas y sutiles, los ojos bayos,

p[o]r algo descubiertos, y de notable hermosura,la naris labrada y recta

la boca pequeña, y delgados los labios. La cabeza con una corona q[u]e sujeta

el manto, inclinada algun tanto a la derecha, tunica talar de color de

rosa y jazmín,y sembrada de flores, y  con mangas redondas y sueltas

forradas en felpa {obscura} q[u]e descubre p[o]r los extremos, p[o]r donde sale el blanco

de la tunica interior ajartada á los paños, las manos juntas sobre el

pecho como q[u}e intercede: la luna p[o]r peana con las puntas  hacia arriba

cubiertas algo del manto; contienela un hermoso angel, con los brazos

abiertos tocando el manto, y q[u}e no descubre sino desde la mitad del

pecho, brazos, alas, y cara. se le descubre algun tanto una tunica blan-

ca interior, y la  exterior de un color de grana con un boton de oro

q[u]e la abrocha en el cuello, las alas estan pintadas de colores: al remate

pie de la pintura se descubren m[a]s rosas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-4v.}

 

                                         C[apitulo] 6

A fines de agosto de 1736, á la p[ar]te oriental de México, en el pueblo

de Tacuba llamado antiguam[en]te {Tlalcopan} distante una leg[u]a de México

comenzo a sentirse entre los sirvientes de un obraje una fiebre aguda

y mortal. A pocos dias de aquel  primer asalto quedaron infectados todos

los vecinos de aquel obrage, y muchos otros de los contornos de Atzcapotal-

co, empesándose a sentir en México la misma pestilencia, la qual nacio tan-

to en estos ultimos meses, q[u]e cargado el hospital r[ea]l y demas de México, esta-

ba al mismo tiempo infectado todo México y los pueblos de sus lagunas.

Los caracteres de ese mal eran, frio interno y continuado brevemente do-

lor de cabeza, dificultad en la respiración, dolor de ojos interno, en algunos

copioso fluxo de sangre de narices q[u]e duraba dos o tres dias; a otros sobre-

venian  parotidas q[u]e se curaban facilm[en]te; a otros una intensa literi-

cia q[u]e crusaba como amarilla; terminaba en otro, p[o]r un ardor y

dolor mui intensos en todas las articulaciones, y en algunos el tercero

o quarto dia comenzaba un fuerte delirio. La mortandad fue enorme.

La noche del 7 de s[ep]t[iem]bre de 1736 sufrio México, un fuerte terremoto

el viento austral o del sur es mui fatal en México, donde sopla

con prisa en enero, febrero y parte de marzo: los antiguos mexi-

canos lo llamaban la muerte.

Este viento sopla con tanta presion y continuación en diciembre de

1736. q[u]e rompio todas las ventanas de los templos, rompio las cruces de

los amborrios, llevo cornisas de suma fortaleza, desencajo fuertes ve-

letas, destroso los campos, troncho arboles, daba en tierra con los hom-

bres.

Asombro en esta peste verla correr p[o]r una ciudad tan populosa y

acometer solo a los indios.

La cuna, o casa de huérfanos q[u]e tuvo México en otro tiempo se

dio á los P{adres} P{rovisores}de S[a]n Juan de Dios p[ar]a el hospital q[u]e es hoi de los desam-

parados.

Pestilencias de N[uev]a Esp[añ]a desde el tiempo de la conquista hasta {1736}.

1ª en el año de 1544, seg[u]n el P{adre}Morencia, y el Lic[enciado] Miguel Sánchez, o

en el de 45 seg[u]n el P[adr]e Padilla, y Torquemada o en de de {sic} 46, seg[u]n Hen-

rico Martinez: diferencia q[u}e acaso previene de su dirección. Llevare esta

peste de las p[ar]tes de los indios las cinco y seg[u]n el mas bajo compute muri-

eron ochocientos mil indios. Notaronse entonces tres cometas: uno de ex

traordinario color y grandesa en toda la N[uev]a Esp[añ]a: otro en  Huexotzin-

go, con tres lenguas de fuego espantosas hasta en el tamaño; otro a

modo de una espada con su pomo y cruz tambien roxa, q[u]e se veia en

la purificación, lugar de la N[uev]a Galicia, hacia su curso de oriente á

poniente tan extraño, q[u]e llevando la punta hacia el suelo, la volvia á

ocultarse acia el norte con velocidad suma y tanta claridad, q[u]e ha-

cia despareser las estrellas. Notarone tambien otros portentos; en una

fuente de Ascapusalco mano sangre fina p[o]r algunas horas, el vol-

can de Tlaxcala votimo {sic}{vomito} fuego en lugar de humo y cenisas: p[o]r los rios

de su sierra corrieron aguas negras. dexose ver con iris este año

q[u]e formo tres ruedas en contorno del sol.

2ª en 1576. duró año y medio, y seg[u}n el padrón de tributos (en-

q[u}e no entran niño;, enfermos, mujeres y viejos) {sic} llevare mas de dos

millones de indios. Notase tambien entonces el mismo iris q[u]e

en el anterior.

3ª entre las rferidas huvo otras dos bien terribles aunq[u]e no

tan formidables como ellas, una en el año de 1563, otra en el de 1564

referidas ambas p[o]r el dicho Grijalva.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-05r.}                                                                                                 5

 

5ª en 1591 q[u]e se fijó en la Mixteca, y arraso pueblos enteros.

6ª en 1522 ataco especialm[en]te, a los niños de los quales en los pueblos

mas cortos morian de dies a dies y siete cada dia y pueblos

q[u]e contaban con 30 vecinos apenas quedaban con seis mil.

7ª el celebre {cocolistli} en 1597 de q{u}e hablan Herrera y Fr[ay] Gregorio

Garcia, duro mas de tres años y se extendio p[o]r las pro[vinci]as mexi-

cana, mixteca, {tzapoteca}.

8ª en {1636} referida p[o]r Fr[ay] Luis Cyisneros, y el P[adre] Florencia.

9ª en 1641. el mismo Florencia, el q[u]e dice q[u]e duro poco.

10ª en 1642, fue mas vigorosa q[u]e la anterior seg[u]n refiere Ve-

tadeart, q[u]e hace memoria de ello.

11ª en {1661} esto fupe mui g[ene]ral, y habla de ella D[o]n Alonso ra-

mires de Vargas, en su poema q[u]e escribió en quintillas sobre este

asunto.

12ª en {1685} g[ene]ral a hombres, brutos, y vegetales, provenida de

la sequedad de dos años.

13ª en {1696}hace mencion de esta la historia de la congrega-

cion del oratorio de D[o]n Felipe de México.

14ª en 1714, fue rigorosa y maligna, barrio en pocos dias mas

de catorce mil indios de los contornos de México.

15ª en 1727 fue un sarampión peligrosisimo.

16ªen 1734. de viruelas y otros accidentes.

La naturaleza de estos indios es mui propensa a enfermedades

{“} cosa maravillosa es (dice el P[dr]e Padilla Lib[ro] 1 C[apitulo] 33) q[u]e con haver

{“}mudanza de tiempos en el año, nunca la hai en las enferme-

{“}dades de los indios, quando á destajo comienza a derribarlos

lo mismo decia Fr[ay] Gerónimo de Mendieta, en una relacion

q[u]e escrivió en {1588}, de q[u]e se aprovecho Torquemada Tomo 3. Lib[ro]

{37. C[apitulo]15.} ....es mucho mas notable lo q[u]e dice es mismo Padi-

lla: {“} tambien es de considerar, q[u]e sus enfermedades con ser de

{“} peste, q[u}e con facilidad suele pegarse, p[o]r maravilla se pega á los

{“} españoles, y no alguna ves se les pega, no es mortal como en los

{“} indios.

Es admirable el candor, inocencia de costumbres, y escrupulosidad de

los indios de N[uev]a Esp[añ]a el s[eño]r Garces en su memorial habla abundan-

tem[en]te de esta materia haciendo ver, q{u}e esa inocencia no es efecto de

estupidez, p[o]r sobre las materias de piedad, religión y moral, tie-

nen un disernim[ien]to mui vivo. Torquemada habla de los mismo

en el /tom[o] 3/ tom[o] 3 {sic} lib[ro] 17 C[apitulo] 13, hemos hallado (dice Torquemada

con las palabras de los confesores de su tiempo) muchos indios e indias

{“}(en especial viejos y viejas, y mas de ellos q[u]e de ellas) de tanta compli-

{“} cidad y pureza de alma, q[u]e no saben sacar; tanto q[u]e los confesores

{“} con algunos de ellos, se hallan mas enlazados q[u]e con otros

{“} grandes pecadores, buscando alguna materia de pecado, p[o]r donde les

{“}puedan dar el beneficio de la absolución.

{283-05v.}

 

Es admirable en prueba de esta pureza de alma el suceso acaeci-

do en {1540}/.../ y consta p[o]r testimonio autentico daba de la comu-

nion en la iglesia del pueblo de q[u]e era guardian Fr[ay Pedro

de Reina, q[uan]do vio q[u]e se le volaba una forma; acudiendo a

buscarla, le dixo el ayudante q[u]e lo era Fr[ay Miguel Esteva-

lis, q[u]e havia entrado en la boca de una india q[u]e la recivió

devidam[en]te hisose comparar a la india la qual contesto sensilla-

m[en]te haverla recivido, y su suma devoción al sacram[en]to.

                                  {Niños mártires}

S[eño]r Martín de Valencia, guardian q[u]e era de tlxcala dio al

P[adre] Fr[ay] Bernardino de Minaya en su expedición apostólica á

Oaxaca tres niños: Antonio, nieto {Xicotencal}, s[eño]r de Tlaxcala, Juan

/.../ de este, y biejo, de familia tambien noble de Talxcala a-

trevido esto en el cristianismo, aborreciendo la idolatria, y de-

seosos del martirio tomaron a empeño por quitar los idolos

y demolerlos. Haviendo llevado a Coautitlan, los sorprendie-

ron es este hecho los idolatras, y los mataron con suma cruel-

dad.

Semejante a estos fue Cristoval de edad de doce a[ños] y primoge-

nito de {Acxotecatl} uno de los quatro s[eñore]s p[rincipale]s de Talxcala, el qual

p{o]r q[u]e aborrecia la idolatria, y embriagues de su padre fue

desollado p[o]r este, y quemado dentro de su misma casa. sepul-

tado aquí mismo el cuerpo p[ar}a ocultar el delito, se hallo in-

corrupto m[ucho]s dias desp[ue]s. Vivia Cortes entonces,q[uie]n sabedor del

hecho, ahorco al p[adr]e.

                                      C[apitulo]10.

Algunos han creido q[u]e los indios son decendientes de  Isachar y su tri-

bu, fundados en la profecía de Jacob Gen[esis] 49 V[ersiculo]14. Isachar asinus for-

tes, acubans inter. terminos vidit réquiem quod enet tona, et terra

quedo optima: et suppomit huymerum sucum ad portandum, et factus est

tributis serviens: qualidades todas q[u]e se encuentran en los indios.

La pestilencia en los indios viene p[o]r lo comun acompañada de copio-

sos fluxos de sangre.

En contorno del templo gentilicio de México havia una gran red

dividida en varios senos capaces de contener cada uno una cabesa de

los sacrificados, las quales permanecían allí hasta q[u]e podridas se em-

pleaban en otras supersticiones.

Fr[ay Gerónimo de Mendieta franciscano hombre venerable, y de los

primeros q[u]e vinieron a las indias, escribe, q[u]e en el año de 1588, en un

pueblo distante una ley[edend]a de {Tlaxcala} una indiecita de edad de nueve

a[ño]s gravem[en]te enferma, fue ilustrada del s[eño]r sobre algunos acaesim[ien]tos q[u]e

predijo, y se verificaron a la letra á saberer: q[uan]do havia de perder el

habla y recobrarla, q[uan]do y como havia de morir, con q[u]e personas de

su familia estaba Dios indignado y p[o]r que, y p[o}r ultimo predijo una

peste q[u]e se verifico a los tres a[ño]s y á la q[u]e dio p[o]r causa la  embria-

gues.

La peste de año de {1574} fue tambien vaticinada p[o]r otra

india de nueve a[ño]s a la qual añadio otras profecias mui notables

q[u]e se verificaron. Ambos sucesos los refiere el P[adre] Torquemada

el mismo refiere otra aparicion de la Virgen S[antis[i]ma en traje

de india, a un indio viejo en la laguna de Chalco junto a Xo-

chimilco: a q[uie]n desp[ue]s de haverle hablado sobre las cosas mas o-

cultas de su corazón, le añadio q[u]e dijere al guardian amonesta-

re al pueblo a penitencia, p[ar]a no {/viniera/} la peste q[u]e corria

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-06r.}                                                                                                             6

 

en la gentilidad no havia penitencias en la N[uev]a Esp[añ]a.

El V[enerable] P[adre] Fr[ay] Domingo de Betanzos, fundador de los dominicos de

N[uev]a España decia abiertam[en]te a sus religiosos lo mismo q[u}e escribió al

virrey D[o]n Antonio de Mendoza, que p[o]r justo juicio de Dios antes

{“}m[a]s edades se havian de acabar los indios de este tierra, de tal su-

{“}erte q[u]e los q[u]e de otras vinieren a ella, preguntarian de que color

{“} eran a quellos indios, que vivian en estas p[ar]tes antes q[u]e los españoles vi-

{“} nieren a ellas, el s[eño]r Padilla refiere este suceso.

La isla de S[an]to antes de la conquista tenia cinco reyes cada uno de

los quales poseia estados mui poblados,. el total de esta población era

entonces seg[u]n el Ill[ustrisi]mo Montenegro de {20} millones, los quales estaban

consumidos un tiempo de este prelado: y llego á tanto la falta de echos

q[u]e se pedia un indio a México, como cosa mui preciosa.

Los pobladores ingleses de norte america han acostumbrado

mezclar p[o]r medio de matrimonios sus familias con las de los in-

dios.

El ill[ustrisi]mo Padilla dice: casi siempre hai{todo} en la tierra enfermedades

{“} agudas, que van picando y llevando gente, y pueden venir algunas par-

{“}tes g[ene]rales, q[u]e las acaban mui p[o]r junto.

La embriagues era mui castigada en la gentilidad mexicana: al man-

cebo comprendido en este vicio se le quitaba a golpes la vida en la cara.

Al noble se le deponia de su clase; al plebeyo se le raia el cabello, y se

le derribaba la casa. En {Texcoco} a la primera ves se les hacia escla-

vos, y a la seg[un]da se les marcaba: castigo q[u}e comprendia a los nobles a q[uie]n

se arrojaba al rio. Las mugeres eran apedreadas: lo q[u]e executo un

rei de texcoco con su mujer, sobrina del emperad[o]r de México. O-

tro rei en {Atumba], quito la vida a una tia suya, p[o]r q[u]e criaba

magueyes, y vendia pulque.

Los licores fuertes de Castilla a q[u]e  se entregaron los indios al prin-

cipio, y el exceso en el pulque trajeron a la N[uev]a Esp[añ]a las pestes y enfer-

medades agudas. El pulque se vendia en esos primeros a[ño]s en la

plasa de México, nada mas q[u]e como medicinal y su uso era mui

moderado. Haviendo pasado los indios a beberlo con exceso se trato

de estancarlo p[ar]a lograr este nuevo ramo de ganancia. Al principio

se creyo q[u]e esto presentaria algun embaraso á la embragues: p[er]o ha-

viendo experimentado lo contrario los ministros eclesiásticos, dieron

tan fuertem[en]te contra el nuevo establecim[ien]to q[u]e estuvo en terminos de a-

rruinarse mucho mas haviendo concurrido el dictamen contrario de

la universidad de México. P[er]o insitiendo los arbitristas en el mismo

proyecto se tomo parecer a los medicos, q[u]e declararon uniformem-

m[en]te q[u}e la tal bebida era medicinal.

Antes de este suceso se havia tratado en México del  oien de

las pestes en las indias,y se atribuyo entonces p[o]r dictamen nifor-

me de los México al trigo {blanquillo}, q[u]e seg[u]n Aldrete Tesoxo de la

lengua castellana titulo {Moron}, citando a Otelio, y Rodrigo Mendoza

hai abundantisimam[en]te en la  villa de Moron, distante nueve leg[ua]s de

Sevilla, y es el mejor de España.

Hai notable abuso en su venta de este pulque, se le vende m[uch]o

desp[ues]s de la retencion de meses enteros, torcido, curado, con la ra-

is del tepopote, planta de mala calidad, y mui ardiente adova-

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-06v.}

 

do con cal viva, y con otras confecciones e inmundicias.

El asiento de pulpa á lo mas q[u}e subia en el año {1746} era á

136  p[eso]s anueles a beneficio del rey.

Al exceso de esta bebida atribuye el autor las plagas de los

indios p[o]r este motivo se explica con alguna vehemencia con-

tra el dicho asiento, y caso es este uno de los capitulos q[u]e han

dado motivo a la prohibición de la obra.

                                      C[apitulo]11

Los indios acostumbran curarse con el aguardiente las enfermeda-

des causadas p[o]r el pulque: y con este las de las de aquel ; uno y otro toma-

do con exceso.

Los gastos de bebida y comida en el indio estan en la proporcion

de doce a uno.

En este capitulo trata el autor el juicioso dictamen de un Mé-

xico a q[uie]n celebra sin nombrarlo sobre las causas de las pestes

y enfermedades agudas de los indios. Las atribuye al concurso de

varias causas y a el abuso y exceso de los aguardientes contrahechos

tepaches y otras bebidas fermentadas de frequente uso del agu-

ardiente de Castilla, del pulque viciado con pelos y yerbas  nocivas

con q[u]e lo mistaran p[ar]a fortalecerlo, 2ª al hambre y poco comer del

indio: hace reflexion sobre q[u]e a las hambres siguen p[o]r lo comun

las pestes. 3ª la desproporcion q[u}e hai en México entre el calor

dia y frio de la noche, especialm[en]te en los indios q{u}e duermen

sin mayor abrigo en el suelo, expuestos a toda inclemencia.

4ª al uso de el agua fria estando sudando, y en actual tra-

bajo.

El s[eñor] Visaron prohibio p[o]r bando publico la venta de a-

guacates contrahechos, tepaches y otras bebidas.

El principio de su peste de q[u]e habla el autor se atribuyó á

un barril de aguardiente contrahecho q[u]e se llevo a la hacien-

da donde comenzo el mal.

En prueba de la gran pusilanimidad de los indios se trahe el

año sig[uien]te un indio de Michoacán, conocido entre esta nación p[o]r

hechicero llevando a mal la convicción de los suyos, luego q[u]e en-

contraba á alguno de los meros fieles, lo miraba con un sem-

blante airado, y espantoso, y con una vos imperiosa y terrible

les decia:{ve, y muerete}. el pobre indio se creia hechizado desde

el momento, y moria a fuerza de su triste imaginación. D[o]n Vas-

co de Quiroga, Ob[is]po de Michoacán , conocio de este hecho en el

qual no intervino ninguna otra repetición. Con este motivo fun

dó un hospital p[ar]a q[u]e se crasen en el los cuerpos y las fantasias

de los indios.

D[o]n Carlos de Siguenza dice de los indios: gente la mas ingrata

desconocida, quejumbrosa e inquieta q[u]e Dios crio.

El s[eño]r Padilla hablando de la peste de 1576, hablando de los indios

{“}escondianse (dice) con rabiosa furia p[o]r verse llevar  atrope-

{“}llados de la mente, sin q[u]e su enfermedad se atreviere á los espa-

{“}ñoles. No bastaban las buenas obras q[u]e resivian de ellos en su  en-

{“}fermedad, p[ar]a q[u]e le dejasen de envidiar la salud. Intentaron ....

{“}modos p[ar]a q[u]e los españoles enfermasen: echaban los cuerpos de

{“}los d{ifun]tos en el caño de agua q[u]e entra en México....{sic} indios

{“}huvo q[u]e cgian la sangre de los enfermos, y la revolvían en

{“}el pan y vendian en la plaza.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-7r.}                                                                                                7

 

Oraba una india vieja en el santuario de Guadalupe en                                                     

una pestilencia. Hacia su larga deprecación en voz alta, y

en tono mui patético, y la concluyo de esta manera; {y si han

de morir s[eñor]a los indios, q[u]e mueran, tambien los españoles}.

Fr[ay] Juan de Grijalva refiere, q[u]e los indios enfermos luego q[u]e se

les ministraba el oleo, desesperaban de vivir de manera, q[u]e se

abstenian de todo medicam[en]to y comida.

En la peste de q[u]e habla Cabrera hacian lo mismo concu-

rriendo á ello los mismos parientes: de modo q{u}e el enfermo

moria primero de hambre q[u]e de peste. Algunos luego q[u]e

recibian el oleo se lo iban  a lavar a los rios y lagunas p[ar]a q[u]e

no los matare, y algunos lo hacian peor.

                                          C[apitulo]12.

Es entre los indios mexicanos una serie de supersticiones {con mucho de idolatria} la cosecha o

extracción del {pulque}: llamado en u lengua {agua de Dios}, destilado el

pulque se juntan en combite en el qual se ofrece al Dios {Tezcatzon-

catl} el primer cantarillo: un animo determina los ritos de esta solem-

nidad, el qual se levanta, da vueltas al fuego, y con ciertas plabras q[u]e no

permite oir, asi este ministro como los circustantes, brindan el fue-

go, y hechan en sacrificio parte de lo q[u]e  han de beber. quando se con-

duce a México, suenan cajas y pitanos, se tiran cohetes, se adornan

las cargas y pellejos con m[ucha]s flores, ramos, tafetanes y banderas de las

quales algunas han servido en sus {santocales} u oratorios.

                                     {Residuos de idolatria entre los indios}

D[o]n Fr[ay] Jose Lanziego y Aguilar en una circular (semejantes costas llaman

en México cordillera) de 8 de junio de {1726} dice: hijos mios, con lagrimas

{“}de mi corazon recivo esta dando noticia a todas mis cosas como en e-

{“} sos partidos de la sierra alta,y baja, y la Huasteca perseveran de la

{“}gentilidad de esis mis hijos los indios, la idolatria y adoración q[u]e dan al

{2}demonio, con el nombre de Dios de las cosechas, cuia abominable cele-

{“}bridad la acostumbran cada año p[o]r el mes de agosto desde poco desp[ue]s de

{“} puesto el sol hasta el amanecer, en q[u]e arman sobre ciertos palos una

{“} á modo de diadema, y sobre ella un tambor, y entre los palos fabrica-

{“}da una camilla y encima una olla de miel virgen, y alrededor  {chal-

{“}chihuites}, con hongos, incienso, y granos de mais, tierno y tortillas de

{“}helote, y  pintadas y figuras y sabandijas. en cuia circunferencia

{“}danzan hombres y mujeres vestidos de blanco cantando al demo-

{“}nio y haviendo otras  ceremonias todo a fin de tener visiones, en

{“}años, e invenciones del demonio, reduciéndose este baile a dar gra-

{2}cias al dios de las cosechas.....{sic} pasando todo este bailes, y su ban-

{“}queta en una lastimosa embriaguez.

La idolatria no se ha exterminado enteram[en]te de los indios de N[uev]a Esp[añ]a se

encuentran vestigios de ella baxo las mejores apariencias de critianismo.

No es raro el morir una india o indio con todas las señales de

cristiano y encontrársele dep[ue]s algunos idolos a q[u]e ha tributado en vi-

da una adoración secreta.

                                          

                                    {Historia del palo del volador}.

Es este un soberbio pino de quince a veinte varas q[u]e se trahera {de noche} de la sel-

va, con musicas, danzas, rahamerios, y otras señales de adoración. ha-

cese fiesta y convite en el lugar donde se ha de colocar, y se derra-

ma un pellejo de {pulque} en el hoyo en q[u]e  se le fija. Puerta pues{to}

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-07v.}

 

pendicularm[en]te se cuelgan  de su extremidad seis u ocho sogas, recogidas

en la extremidad de una rueda, q[u]e ajunta en el palo, y puede rodar so-

bre la punta de cada una se fixa  un volantin por la cintura, habien-

dado p[o]r escales de sogas anudadas al mismo palo. Llegada la

hora de volar se van volando al ayre de la rueda  las cuerdas, te-

nian vuelo los q[u]e vienen en ellas haciendo v[aria]s cabriolas al son de

instrum[en]tos y algazara: hasta q[u]e a todo el vuelo de las sogas llegan al vue-

lo, quedando algunos en la rueda p[ar]a voltearla, y el mas dyestro, sobre

el casco en q[u]e ajusta bailando ya de cabeza , ya de pies y haciendo o-

tras distintas suertes. No es permitido a todos entrar en este baile

se dice q[u]e para alistarse en la compañía, han de ir a una  profun-

da cueva del monte de {Joco} o de {Ajusco} a solicitar el destimonio, la

destresa en el baile: que alli hace aquel espiritu tres apariciones,

la primera a la entrada de la cueva en figura de un etiope, la

2ª  a otra distancia en la de un Leon, y la 3ª en la de serpiente,

bajo de todos los quales aspectos se le ha de rendir adoración. Según

lo q[u]e fuere de este suceso, ello es q[u]e el palo ha caido bastantes v[eces]s

ó los buenos bailarines han baxado precipitadam{en]te muchos v[ece]s ha

encontrar la muerte. Los ministros evangelicos han procurado

exterminar este juego p[o]r motivo de religión, p[er]o sin embargo

han resivido de q[uan]do en q[uan]do a la sombra de las justicias con pretexto

de pura diversión.

En la laguna de {Texcoco} hai una isleta q[u]e llaman {Pantitlan}, ó el

{tesoro} en esta isleta se ha creido q[u]e esta enterrado el tesoro de {Moc-

tetzuma}.

Con auxilio de los reyes de {Texcoco, Tacuba, Iztapalapa, Cula-

can y Xochimilco} se hiso en el dicho lugar en tiempo del primer

{Moctezuma} una albarrada p[o]r contener la laguna, en la

inundación del año de {1553 }se hiso en t[iem]po de D[o]n Luis Velasco. En

{1604}. Otra gobernando el Marques de {Montes Claros}.

                                                C[apitulo]13.

Gobernaba en México {como arz[obis]po virrey}en esta peste el s[eño]r Visaron q[uie]n dio copiosas li-

mosnas á los apestados encargando su sitribucion a los jesuitas.

S[eño]r D[o]n Manuel de Baesa Medico de Camara Catedrático de Medtodo, Proto-

medico nombrado y Jues de este Tribunal, curaba en México p[o]r los a[ño]s de

1730.

Sin embargo de las limosnas del arzobispo y otros particulares los enfer-

mos no eran asistidos: bien p[o}r falta de asistentes, bien p[o]r q[u]e a riesgo de

su salud reservaban el dinero q[u]e se les daba. P[o]r lo qual a consulta del

protomedicato tomo el arz[obis]po virrey la providencia, de nombrar a

medicos, y seis boticas, que socorriesen al publico pagado á los pri-

meros á {250} p[eso]s y a estos lo q[u]e causaren seg[u]n tasación de peritos. Lo q[u]e

montó en los meces de enero, hasta mayo de {37. a 35.372}. p[eso]s hasta q[u]e

en el mismo mes de mayo p[o]r abusarse en estos socorros se suspendio esta

provid[enci]a.

El P[adre] Juan Martín, remita acredito en esta parte su gran cantidad

p[ar]a con los enfermos.

                                     {Hopitales de México}

1º el de S[a]n Pedro contiguo a la iglesia de la S[anti]s[i]ma Trinidad, á cargo

de la congregación, y de su antiguisima archicofradía. es p[ar]a  lavar dotes.

2ª el del amor de Dios fundado p[o]r el P[adre] Zumarraga, p[ar]a Galio.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-08r.}                                                                                                    8

 

{Hospitales de México}

3º el real, costeado p[o]r el rey p[ar]a curación de indios.

4º el de la Concepción ó de Jesús Nazareno, fundado p[o]r el Marques

del Valle.

5º el de S[a}n Hipólito, p[ar]a toda clase de enfermedad especialm[en]te la locu-

ra.

6º el de S[a]n Juan de Dios, es de hombres y mujeres.

7º el del Espiritu S[an]to tiene el mismo destino.

8º el de S[a]n Lazaro p[ar]a leprosos.

9º el de S[a]a Antonio Abad p[ar]a los q[u]e padecen el fuego de S[a]n An-

ton.

Fuera de estos  hospitales se formaron provisionalm[en]te p[ar]a esta par-

te siete /provisionales/, los dos primeros p[o]r el P[adre] Juan Martinez, y

concurriendo en todo la piedad del virrey, temiendo no poca p[ar]te

el ayuntam[ien]to y alguna el consulado. Es notable q[u]e el estreno, del

nuevo coliseo de gallos fabricado p[o]r p[ar]te Catalina fue servir en

esta ocacion de hospital. {sic}

                                          {C[apitulo] 14}

 Este capitulo se refiere  todo a tirar contra los malos medicos o contra

los q[u]e se siguieran tales,cuia impericia contribuyó mucho a los extragos

de la peste.

                                            {Ca[apitulo] 15}

En la peste de {1576} dice el P[adre] Padilla se hiso anatomia de un indio

en el hospital real y se encontro el higado inflamado, y con una san-

gre venenosa.

Ammes homines artem medicam none oportet, et ex hismáxime cos gli

eruditions au eloquentio egomitionem habent. bemocrito te nab. aum ad

aypp.

                                        {Lib[ro] 2 C[apitulo]1}.

                                       Casa de Loreto.

 Los .....entraron en México en {1570}. Los caciques comarcanos se les

ofrecieron a fabricar un colegio p[ar]a  educación de sus hijos: se edifico pues p[o]r

entonces pobrem[en]te el de S[a]n Gregorio. El P[adre] Juan Bautista Zapa, viniendo de

Lombardia a esta pro[vinci]a trajo en {1679}. dos cabezas de la imagen y del

Niño q[u]e aunq[ue] penso llevar a la misión q[u]e le tocare quedaron con todo

en México. estas dos imágenes son seg[u]n el P[adre] Florencia, perfectam[en]te pareci-

das a las originales. estuvo la imagen alguna tiempo sin capilla, hasta

q[u]e se le fabrico una junto a la iglesia de S[a]n Geregorio, q[u]e se dedico en

5 de enero de {1680}. quedando esta poco acomodada se le fabrico otra

en {1686}. cuia dedicación duró dies y seis dias; alli ha permanecido

desde entonces, y hacen su fiesta el 30 de diciembre los cantores de la

iglesia catedral. con motivo de la peste del año de {36}. se le hicieron a

esta imagen varios novenarios mui solemnes y costosos, á los quales siguió

á principios del de 37 una procesión en q[u]e p[o]r llevarla a su santuario

se gastaron, mil quatrocientos pesos, cinco tomines y medio de cera,

y habiéndosele cedido a la virgen laa quedó de la  procesión se hallaron

mas de {87} a[ño]s desp[ue]s de esto se hizo de nuevo el hecho de la capi-

lla q[u]e quedo mui luida.

En la procesión de N[uestr]a S[eñor]a de los Remedios del año de {1616} dice el

P[adre] Fr[ay] Luis Cisneros q[u]e se gastaron 300 p[eso]s de cera, distribuida en

{20} mil personas de acompañam[ien]to, y quedaron 40 á favor de

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-08v.}

 

la imagen.

Con motivo de una peste q[u]e huvo en Constantinopla en q[u]e mo-

rian diariam[en]te de cinco a {diez} mil personas se instituyo en {594}

una peste q[u]e los griegos llamaron {Aypapantes}, y los latinos {ocur}-

so del s[eño]r q[u]e es la fiesta de la Purificación de N[uestr]a S[eñor]a Baronioin

mart ad an {1544}.

                                       C[apitulo]2

El autor hablando de las imágenes milagrosas de N[uev]a Esp[añ]a, q[u]e son tantas

q[u]e su historia comprenderia quatro tomos.

                        Imagen de N[uestr]a S[eñor]a de los remedios.

Esta imagen no excede de un codo. No es mui cierto qual de los conquista-

dores la trajo a este reino p[er]o se tiene p[o]r mas cierto la condujo Juan Ro-

driguez de Villafuerte á q[uie]n la donó un hermano suyo agustino, junto con

un cinto encargándole se valiera de su protección en la  guerra con los in-

dios, el dicho Villafuerte acostumbraba traerla siempre consigo en una

capilla de /oyade/ oja de lata  en la manga derecha de su gaban. Se dice q[u]e

esta fue la imagen q[u]e derrocaros p[o]r Cortes los idolos del templo gentilicio de

México, se colocó alli p[o]r el mismo; y aun se añade q[u]e tratando muchas v[ece]s

los gentiles de removerla del lugar donde se colocó jamas pudieron ven-

cidos de una duresa y peso imponderable q[u}e se advertia en la imagen

en la celebre accion o fuga de la {noche triste} la condujeron consigo

hasta el lugar donde esta hoi en dia su templo, q[u]e se llamo p[o]r en-

tonces de la Victoria: distante tres leg[ua]s de México, al {noroeste}, y conocido p[o]r a-

cue de {Otomcapulco}. Aunq[u]e /se/ cree el autor no sin fundam[en]to q[u]e los espa-

ñoles, q[u]e no pudieron extraer de México las cosas mas  necesarias, mu-

cho menos podrían en aquella fatal noche sacar del templo la imagen

y conducirla al lugar en q[u]e se halla.

(( {sic}según anales de un conquistador q[u]e leyo el maestro Cisneros, Cortes de-

rribados los idolos, encargo á Juan Rodríguez de Villafuerte exigiera

casa a N[uestr]a S[eñor]a de los Remedios.

Se refiere q[u]e á mas de la Virgen S[antis[i]ma q[u]e mortificaba a los indios

arrojando polvo a sus ojos, peleaba tambien contra ellos con caballerias

en un caballo blanco y con espada en mano, del qual decian los

indios q[u]e hacia tanto daño con su espada, como con su caballo.

Torquemada Lib[ro] 4 C[apitulo] 69 el mismo autor añade: quisieron (los in-

dios) quitar este dia una imagen de la m[adr]e de Dios N[uestr]a S[eñor]a  del altar

del templo adonde la puso Cortes, y se les pegaban las manos, no

pudiéndolas desasir en gran rato: á otros se les enflaquecían los

brasos e[tceter]a)).

D[o]n Juan de Tobar, noble cacique, llamado en su gentilidad {le quautli} vecino

del pueblo de S[a]n Juan llamado antiguam[en]te {Teocalhuican} cercano al cue de

{Otomcapulco}notaba al pasar p[o]r este sitio q[u]e el tal {cue} se levantaba en el

aire y descubria a la Virgen S[antis[i]ma llena de resplandores, y q[u]e le hablaba

amorosam[en]te arrebatado de esta vision repetia su viaje p[o]r alli mismo p[ar]a

dirigirse a Tacuba p[o]r donde estaba su parroquia, y dio tambien parte

á los religiosos franciscanos del nuevo, q[u]e no fue creido. encargado p[o]r estos de

no hablar sobre el asunto, y aun de olvidarlo, trato de tomar otro ca-

mino, q[u]e concurriendo a la fabrica de la iglesia de Tacuba.le cayo

encima un pilar, q[u]e lo dejo sin  sentido, y en terminos de espirar.

Se pensaba ya en su entierro, q[uan]do al dia seig[ien]te del golpe, se presen-

ta Juan de Tobar enteram[en}te sano y capas de concurrir al tra-

bajo. q[uie]n habia sido restablecido milgrosam[en]te p[o]r la Virgen q[u]e

apareciéndosele en la noche y consolándolo, le dexo un cinto p[ar]a

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-09r.}                                                                                                          9

 

q[u]e se lo ciñere; ( el mismo cinto con q[u]e vino a esta tierra la imagen

de remedios). Cuando el dicho dean a pocos dias de restablecim[ien]to p[o]r el

bosquesillo de Otomcapulco, e internándose en las molesas encon-

tro en ellas la imagen de remedios, tal como se le havia apare-

cido  siempre, condujola a su casa p[ar]a  darle culto, y la tuvo consi-

go seg[u]n el conjunto. q[u]e se ha hecho á dies a doce a[ño]s. Al fin de este

tiempo desaparece la imagen de la cara de Juan, el q[u]e persuadido á q[u]e  no in-

tervenia en este hecho diligencia humana, para el monte al buscar-

la, donde  la encuentra. Reconociéndola amorosam[en]te sobre su suya

la conduce de nuevo, y  sin embargo de los sencillos obsequios q[u]e le

hacia, repito en volver al monte, sin valerle el arbitrio de en-

cerrarla en una caxa, de dormir sobre ella, y aun de pasar

en vela las noches afligido de estos accidentes consulto en México

al Maestro en vela D[o]n Alvaro Treviño; q[uie]n  ha de parecer se le fa-

bricare un altar {en el celebre}/y despu en el/. Aunque con todo del altar. y para-

ba al monte: creyose q[u]e queria templo, y se le fabrico uno en el

pueblo de S[a]n Juan , el q[u}e tambien dejo p[o]r el monte. enfermo en

este tiempo gravem[en]te D[o]n Juan y haviendo hecho q[u]e se le pasase

en silla de manos al santuario de Guadalupe, logro q[u]e le hablara

la virgen en estos terminos; ¿a que vienes a mi casa, pues teni-

{“}endome en la tuya me hechaste de ella.?. p[o]r que ya q[u}e me echas-

{“}te de tu casa no me vilviste al lugar donde me hallaste.

disculpado humildem[en]te  el indio, consiguió la salud, y {el} encargo de con-

gregar a los vecinos de su pueblo p[o]r q[u]e se le fabricare templo a la

imagen de remedios en el cue de {Otomcapulco}. Partio resta-

blecido el moribundo Juan, caminando a pie las dos leguas q[u]e

hai de Guadalupe a su lugar, donde congregados los reinos, y auxilia-

dos de los de {Totoltepec}, se concluyo, brevem[en]te una hermita en

el referido lugar fue cosa asombrosa, q[u}e concluida la iglesia, la

imag[e]n p[o}r si misma, abandono el cuidado de conducirla, se coloco

en ella. A los 20 a[ño]s esto es en {1574} se veia esta hermita en el esta-

do mas  infeliz, p[o]r su destroso, desaliño, y falta de culto, de lo qual

movido el Receptor Fr[ay] Diego de Albornoz, consiguió se le edifica-

se un templo p[o]r la ciudad, y q[u]e esta tomare, el  patronato: conclu-

yose la obra al año sig[uien]te. y en el de {1629}, se le hecho una

techumbre de bobeda.

El autor cree q[u}e esta imagen es la misma de {que}habla Fr[ay] Ant[oni]o de

S[an]ta Maria en su {Esp[añ]a triunfante foli[io] 129} y D[o]n Jacinto Arias en

sus {antigüedades de Alcantara} libr[ro] 2 C[apitulo] 9. Madrid año de {1661}.

La primera parroquia q[u}e tuvo México fue donde es hoi el cemen-

terio de la catedral, con el titulo de S[a]ntiago. Se cree q[u}e el prime-

ro q[u}e la administro, fue D[o]n Juan Dias Capellan del exercito

de cortes. A este sucedió p[o]r nombram[ien]to de Carlos V. en {1523} el

B[achille]r D[o]n Pedro de Villagra; desp[ue]s perdio el titulo de S[a]ntiago, y pre-

valecio el de N[uestr]a S[eñor]a de los Remedios. Clemente {VII} erigio esta

iglesia en catedral.

El santuario de esta imagen reduxo su esp[aci]o enteramente.

El año de {1589} a los {14} a[ño]s q[u}e México havia tomado el patronato de

este santuario, trataron los frailes franciscanos, seguros de la protección

del Virrey Marques de Villamanrrique de hacerse del santuario.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-09v.}

 

se havia levantado como p[ar]a sostener el asunto desde entonces ha que-

dado el braso en la misma postura, los dos dedos q[u]e hacen el cona-

to tan rosagantes q[u]e parece, q[u}e vierten sangre, sin haver podido ad-

mitir encargo, p[o]r m[a]s diligencias q[u}e se han hecho: el cuerpo en

la aptitud de un hombre fatigado, y q[u]e  recive mucho peso, su rostro

perdido la deformidad anterior, y cobro una hermosura q[u]e embeleza.

Las religiosas cuidan de vestirlo mas p[o]r necesidad, q[u]e p[o]r aseo, p[ue]s se ad-

vierte q[u]e destrosa los vestidos, las medias, y zapatos. Lavan tambien

su cuerpo, y esta ayuda se cree eficaz p[ar}a curar muchas dolencias

suelen llevar esta imagen a los enfermos, y se asegura, q[u]e al q[u]e es-

felis se manifiesta un rostro alegre y triste al q[u]e esta de muer-

te; tambien se tiene p[o]r cierto haver sudado sangre en {653} en

la muerte de la M[adre] Leonor de la Asunción exemplarisima re-

ligiosa de aquel conv[en]to y cuio cuerpo se hallo incorrupto, flexible

y oloroso a los diez a[ño]s.

                                          S[a]n Francisco Xavier

Hisomuchos milagros en México p[o]r los años de {1660} de los {que} se tomo

información veridica ante el Arzob[is]po Fr[ay] Mateo Sagade Buguey-

ro, p[o]r los quales se determino jurarlo patron, como en efecto se

hiso en el mismo año, señalando dia de precepto, su fiesta, como

en efecto se observó se observó {sic} hasta el de 1688 en q[u]e se publico en

México la Bula de Urbano 8º sobre la reformacion de las fiestas.

Asi una imagen de este s[an]to en la parroquia de la Veracruz, de la

qual se dice q[u}e su semblante muda de colores: sacose en procesión

en 17 de agosto de {1659}, y habiendo caido una fuerte lluvia q[u]e

anego a todos los concurrentes, la imagen toda quedo intacta y

seca, tiene una congregación ó cofradía en la misma iglesia fun-

dada en 1657 de la qual fueron los primeros congregantes los  Du-

ques de Albuquerque, y el Arzob[is]po Bagueyro y p[o]r la qual se fa-

brico al s[an]to una suntuosa capilla en 1660.

                                      C[apitulo] 10

Congregado el ayuntam[ien]to de México en  febrero de {1737}.trata

de elegir p[o]r patrona a N[uestra] S[eñor]a de Guadalupe:nombra p[o]r concilia-

rios y diputados p[ar]a este objeto a los Receptores D[o]n Felipe Cayetano de

Medina y Sarabia y a D[o]n Jose Fran[cis]co de Aguirre y Espinoza, El

cabildo eclesiástico nombro tambien p[o]r diputados p[ar]a este objeto al

Avediano Fr[ay] Alonso Fran[cis]co Moreno y Castro, y al Magistral Fr[ay] Bar-

tolome Felipe de Itta y Parra.

En la peste de {1576}, murieron 24 frailes dominicos y contagiados: en la de 37. en-

fermaron treinta y murieron poco menos.

En una capilla interior del con[ven]to de los dominicos se venera una imagen del

s[an]to cristo de la expiracion, donde tienen una cofradía los negros.

                      S[an]to Cristo de noviciado de S[an]to Domingo.

El V{icario} Vetanzos seg[u]n escrito del Ill[ustrisi]mo Padilla haviendo concluido en el año de {1538}

la fabrica de su conv[en]to decreta p[ar]a la capilla del noviciado un S{an]to Cristao, q[u}e sir-

viere de modelo á sus novicios; p[ar]a la impericia de los habitantes del pais en

la envoltura le hacia duda del hallazgo de una otra q[u]e satisfaciese a

sus desesos. En este tiempo se presentaron á la porteria del conv[en]to dos in-

dios vendiendo un crucifijo tal como lo quería el P[adre] Bentansos; reci-

velo como un /don/ del cielo, hace entrar a los indios, dexando ce-

rrada la porteria, y á pocos pasos q[u]e ocupo en contemplar la ima-

gen, vuelve la cara a los indios, y encuentrase sin ellos, buscar

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-010r.}                                                                                               10

 

favorables efectos de la venida.

La pestilencia de {157} arrebatio dos millones de indios.

En la procesión de {1642}, recibio el s[eño]r Palafox descalso á la ima-

gen.

El año de {1656}, gobernando el Duque de Albuquerque, el {ingles}

Cornelio Blac, G[ene]ral de Cromuvel esperaba con ansia ma flo-

ta; esta se escapo felizm[en]te p[o]r una larga detención en la lagu-

na de Apalache la qual des[es]pero a Blac. Se atribuye este

efecto a la procesión q[u]e se hiso a la imagen.

En 1692 estuvo la imag[e]n dos a[ño]s en México:labrosele en este tiem-

po un suntuoso.camasin.

Se le hace fiesta á esta imagen el 1º de septiembre con asisten-

cia de virrey, audiencia, tribunales y cabildos: fue ordenada esta

p[o]r el monarca con ocación de haverse escapado en {1696}, una rica

flota q[u]e era objeto de la vigilante codicia del ingles.

                                     C[apitulo] 4.

En la pestilencia de {1544} dispusieron los frailes franciscanos una procesión de indie-

citos de ambos reynos de edad de siete a[ño]s. la q[u]e condujeron al santuario de Gua-

dalupe trece a[ño]s desp[ue]s de la aparicion de la s[eñor]a y al dia se comenzo a sentir el

alivio.

Su imag[e]n de N[uestr]a S[eñor]a de los Remedios conducida a México curo la peste de

{1576}.

Sobre la inundación de {1629}, de q[u]e se habla a la 2ª f[iest]a de este quad[ero] debe a-

ñadirse q[u]e  fue la octava contando las q[u}e sucedieron en tiempo de la gen-

tilidad, y la quinta desp[ue]s de la conquista. trayose entonces la imagen de

Guadalupe a México en canoa, y toda la procesión fue de esta manera;

gobernaba el Marq[ue]s de Cerralvo. Las aguas sin embargo de esto no cesaron,

antes en el año de 31 aumentadas las lluvias y crecidas las lagunas fue

tanto el ímpetu de ellas, q[u]e se tuvo esta p[o]r 2ª inundación se refiere una

aparicion hecha á la  M[adr]e Ines de la Cruz  de Acosta de Jesús Maria, y

fundadora del conv[en]to de Carmelitas Descalzas, en q[u]e se le represento a la vir-

gen intercediendo ante su hijo s[anti]s[i]mo p[o]r  la salud de esta ciudad, contra

q[uie]n estaba airado. A este temor se refieren otras apariciones como la de

la virgen s[anti]s[i]ma a Petronila de la Concepción Tonada de Jesús, q[uie]n vió a la

S[eñor]a sosteniendo las paredes del conv[en]to. El hecho es q[u]e la inundación duro cin-

co a[ño]s y q[u}e en el de {1634}. sobrevino un fuerte terremoto al qual si-

guio la seca: seguram[en]te como pensaron algunos p[o]r q[u]e con este sacudim[ien]to

g[ene]ral se abrieron algunos cauces o grietas en las lagunas, y facilita-

ron al desenso de las aguas.

D[o]n Alonso de Cuevas Dávalos fue confesor de la {dicha}V[enerable] M[adre] Ines q[uie]n le pro-

fetiso q[u}e seria Arzob[is]po de México, como en efecto lo fue, de su misma

patria.

En la peste de q[u}e habla el autor  se proyecto en cabildo traer en

procesión la imagen de Guadalupe, lo q[u]e repugno el arzo[bis]po virrey,

proponiendo q[u}e se le hiciere un novenario el q[u}e se refirio con

m[ay]or solemnidad.

                                     C[apitulo]5

Apartando la peste de México determino el cabildo con anuencia

del virrey dirigir sus plegarias a siete advocaciones y a la sangre

de C[ris]to 2ª S[an] Jose 3a S[a]n Cristoval 4a S[a]n  Sebastian, 5a S[a]n Roque

6a S[a]n  Rafael, 7 a S[an]ta Rosalia.

S[a]n José es patron de N[uev]a E[span]a enla conversion de los indioos p[o]r tal se

declaro en el sínodo Pro[vinci]al de {1555}, y en el de 1585 se mando

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-010v.}              

 

q[u]e su fiesta tuviere octava, lo q[u}e no se ha practicado se dice q[u]e el s[an]to

se aparceio a la V[enerable] Marina dfe escobar, y le dijo q[u}e la conversión de

los indios corria de su parte.

Tuvo México una famosa pintora llamada la Sumaya, de q[uie]n en-

tre otras excelentes se conserva el quadro del martir S[a]n Sebastián

en la iglesia catedral, enseño a su marido Baltasar Echave, vi-

cario celebre en el  mismo arte como tambien sus hijos.

La iglesia de México fue primero abadía sujeta al Arzob[is]p[a]do de Sevi-

lla, desp[ue]s ob[is]p[a]do sufraganeo de Sevilla, ultima[men]te arzobispado inde-

pendiente conformándose al rito de Sevilla. Los primeros clerigos

q[u]e vinieron á las indias eran sevillanos. Ill[ustrisi]mo  Padilla Lib[ro] 2 C[apitulo]

{35}.

En 20 de febrero de {1565}. se dio comision al M[aestr]o {de} escuela D[o]n Sancho

Sánchez p[ar]a efectuar p[o]r escritura de oblig[acio]n la asistencia á la proce-

sion y mira de S[a]n Sebastián en su iglesia con los capitulares, dipu-

tados mayordomos y s[eño]res de su cofradía.

En el monasterio de S[a]n Bernardo se tiene una imagen del {cue

homo}, se llama vulgarm[en]te el {cue-homo del peso. Deseaban estas mon-

jas una imagen tal como la referida, q[uan]do, se les presentaron en la

portaria unos artífices, q[u}e se comprometieron a hacerlo, p[er]o pidieron

un peso en señal, trayéndolo en efecto como lo havían prome-

tido, p[er]o jamas volvieron p[o]r el resto del dinero.

                                      C[apitulo] 6.

Durante esta pestilencia huvo un eclypse de sol, el qual causa tanta cons-

ternacion en México q[u}e familias enteras salieron del lugar p[ar]a re-

fugierse en Guadalupe, y otras pasaron la noche en oración y

lagrimas.

México tiene quatro santuarios de l virgen extramuros, y q[u]e son

objeto de su veneración: de N[uestr]a S[eñor]a de Guadalupe al norte, de N[uestra] S[eñor]a de

la Bala al oriente, de N[uestr]a S[eñor]a de los Remedios al poniente,

y de N[uestr]a S[eñor]a de la Piedad al sur. Los dominicos cuidan de este

ultimo. cuenta estos religiosos de su imagen q[u]e trahida de Roma so-

lo en dibujo p[o]r la tardanza y pereza del pintor á q[uie]n se le encar-

go, al descubrir el lienzo en México, se hallo milagrosam[en]te aca-

bada. Sea lo q[u]e fuere de este hecho el q[u]e lo dan p[o]r cierto otros autores

q[u]eno son los dominicos, al Arzob[is]po La Serna declaro p[o]r autentico

en 1614 algunos milagros q[u]e se le atribuyen. El virrey Duque de

Linares enriquecio este santuario, q[u]e lo ha sido cada dia mas

p[o]r la devoción mexicana.

                            Archicofradía del Rosario de México.

Con el P[adre] Fr[ay] Domingo de Betanzos , fundador de los dominicos de Mé-

xico vino en {1526}. Fr[ay] Tomas de S[a]n Juan o del Rosario, hombre de

irregulares virtudes, y de q[u]e se asegura q[u}e la S[anti]s[i]ma Virgen  lo libro de

un asalto del domonio, y de una enfermedad mortal. Este fundó

desp[ue]s la archicofradia del rosario en {1538} cuia imagen estaba

entonces en una tablilla, p[er]o se hiso desp[ue]s toda de plata de la esta-

tura de una mujer, y aunq[u]e se sacó en los primeros a[ño]s se man-

tiene hoy firme en su altar, tiene otra imagen p[ar]a las procesio-

nes, cuias alhajas son de inestimable valor. ya se ha hablado

en el extracto de las gacetas de los dotes q[u]e da esta cofradía,

Cabrera añade q[u]e desde su fundación hasta el año de {1738}

se havian dotado {4476} huérfanas cuias dotes asendian a un

millón 342.800 p[eso]s.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-011r.}                                                                                                          11

 

En el templo de S[an]tiago de Tlatelolco de México hai una imagen de

S[a]n Antonio, tenida p[o]r milagrosa, y cuia historia es la sig[uien]te un cor-

pulento crucifijo perteneciente a un indio del barrio de Tlatelolco

sudo copiosam[en]te de lo q[u]e testigos algunos españoles obraron con el cruci-

fixo p[ar]a colocarlo en el templo de la Parroquia de S[an]ta Catalina: amo-

tinados los indios trataron de recobrar su alhaja con las piedras

de las quales cayo una {en la} garganta al pie derecho, {de la imagen} donde levanto un

manchon acordonaló y moreteo la parte, en la qual permanece has-

ta hoi la hinchason y un cendal conducido el crucifixo á la igle-

sia de S[a]ntiago, una imagen de S[a]n Antonio, q[u]e hasta entonces ha-

via tenido los ojos fixos en un niño q[u]e tenia en los brazos, los levanto

p[ar]a ver al crucifijo, y permanece de esta manera.

Cuenta el autor q[u]e en una procesión q[u]e tuvieron los indios de S[a]ntiago de

Tlatelolco sacaron a S{an]tiago a caballo vestido de su tunica morada,

con una corona de espinas y su disciplina en la mano.

                                                  C[apitulo] 7.

Se advierte en méxico q[u]e la peste iba en aumento a[uan]do mas frequentes eran las

digregaciones publicas, lo q[u]e fue causa del rumor q[u]e les atribuia la fuerza de au-

mentar el mal, en ves de curarlo: la ignorancia no advertia, q[u}e los grandes

concursos {donde} /....../ concurren sanos y enfermos, y donde se levanta m[ay]or porcion de

vapores aumentan el contagio.

                              Archicofradía de la S[anti]s[i]ma Trinidad.

Sentada en México en 20 de marzo de {1580}, y agregada a la Roma

en {1582}. tiene este cofradía doce caballeros guardianes de los quales uno es ter-

cero, y año q[u]e preside a la junta y se llama primilenio: se le agrega el  gremi-

o de los sastres, y usa p[o]r insignia una cruz roxa y azul en campo carme-

si.

                                        S[an]to Cristo de la salud.

Es esta una imagen q[u}e se venera en la iglesia de la S[anti]s[i]ma Trinidad, y pertene-

cia a u archicofradía, la q[u]e la cedió a los jopenos q[u}e fueran sus cofrades

 por algun tiempo en compañía de los sastres. el poco culto q[u]e tenía esta ima-

gen dio motivo á q[u]e  la cofradía la pasase al gremio el propietario, q[u]e

agregaron a su cuerpo á los lizojenos y barteros desde 23 de octubre ,

de /1632/ 1652 haciendo la entrega con ciertas condiciones, y formando al

congreso un cuerpo de cofradía. Se cuenta q[u]e uno de sus primeros ma-

yordomos entregado al juego, quedo cubierto de lepra , y  conociendo

su delito hiso lo llevasen alpie del s[eño]r donde estuvo todo un dia

pidiéndole misericordia hasta q[u]e salio de alli sano y arrepentido.

Formaronse desde entonces en {1705} otras  constituciones p[o]r las q[u]e son

obligados los mayordomos en su ingreso a presentar fiadores.

                               N[uestr]a S[eñor]a de la Bala.

Esta imagen esta al oriente de México: pertenecia á un vecino de Izta-

palapa, q[uie]n ardiendo en zelos con su mujer le disparo un balaso, del q[u]e

quedo prodigiosam[men]te libre acogiéndose detrás de la imagen, en cuio pie

penetro la bala sin haver podido sacar; quedando el pie sin alguna

mancha, y sin despostilladura  como debia tenerla, p[o]r ser la imagen de

marfil: conducida desp[ue]s á la iglesia de S[a]n Lazaro en México resu-

cito a una dif[un]ta cuio entierro se estaba haciendo.

                              S[an]to Cristo del Balazo.

Esta imagen esta colocada en la misma iglesia de San Lazaro con el  m[ay]or

culto de el año de {1738}. Havia tenido su lugar en la iglesia vieja al la-

do de N[uestr]a S[eñor]a de la Bala, hasta q[u]e reparado este templo, y colocada mas

decentem[en]te la s[ant]a se pasó el Cristo a una escalera, donde se advir-

tio q[u]e las {velas de} /q[u]e la la / cebo q[u]e se le ponian, p[o]r pequeñas q[u]e fueren no

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-011v.}

 

se apagaban: cayóse tambien una noche, y sin embargo q[u}e era de

corcho, se hiso un leve daño en una pierna,y llevole la mitad

de la cara a un leon de piedra, q[u]e estaba inmediato. Con este

motivo se trato de darle mejor lugar, y haviendo depositado

algunos dias en la iglesia de S[a]n Bernardo se dice haver sana-

do allí á una q[u}e adolecia de diarrhea, y a otra asmática, como

tambien á una hipropica el dia de su trasplacion a la iglesia

de S[a]n Lazaro, en el motin de México en el año de {1692}ensa-

yandose algunos del barrio de S[a]n Lazaro en tirar el arcabuz

tiraron al blanco, y la bala atravesando la puerta de la iglesia

paso también  una pierna del S[an]to Cristo, de cuio suceso le viene

el nombre.

D[o]n Carlos de Siguenza hizo una relación de este motin, q[u]e se impri-

mio en Madrid en {1693}, en ella dice q[u]e la infantería de Palacio

no tenia ni doce balas, ni seis mosquetes, y q[u}e el daño q[u]e hicieron

en palacio{,} el saqueo y el  fuego paso de tres millones.

                                                C[apitulo] 8.

                                S[an]to Cue-Homo de la iglesia de Regina.

Es tradición entre las monjas mas antiguas, de este monasterio, q[u]e un ve-

cino de México haviendo soñado con una imagen. de Cristo llamado escul-

tores p[ar]a q[u]e se la labraran tal como se la havia figurado. No haviendo acep-

tado las primeras diligencias, se le presentaron unos indios con sus til-

mas blancas los q[u]e prometieron cumplir sus deseos sin exijir otra co-

sa q[u]e un quarto separado p[ar]a su trabajo. Al cabo de ocho dias notando-

se la falta de estos hombres se entro al quarto y se halla la imagen

tal como la deseaba el devoto.tenia esta imagen á los principios la cabe-

za recta y se dice haverla incluido p[ar]a darle a entender a los religiosos

agustinos q[u]e se le havian perdonado sus pecados, esta imagen dio en sus

principios ocacion a algunas contestaciones entre los agustinos, q[u]e  que-

rian llevarla a España y sus legitimos dueños: ella vino p[o]r ultimo a pa-

rar á la iglesia de Regina, o bien p[o]r haverla comprado las monjas

en 500 p[eso]s , bien p[o]r haver sido p[ar]te del dote de la M[adr]e Gertrudis de

Cristo de uno y otro hai constancia, en los archivos del conv[en]to. ellos es q[u]e

este la tiene en posesion desde el año de {1633} tenia a esta imagen

p[o]r milagrosa, y en {su} culto se havia erigido dos antiguas cogradias q[u}e p[o]r

falta de fomento cesaron en {1698}. Se la sacaba secretam[en]te p[ar]a la salud

de algunos enfermos q[uan]do en {1699}. acaeció el suceso q[u]e la hiso mas reco-

mendable. orando ciertas religiosas a deshoras de la noche en co-

ro, en tiempo q[u]e la iglesia estaba poco segura p[o]r los reparos q[u]e se

le hacian, vieron un hombre, q[u]e se acercaba a su lampara: no co-

nociendo q[u]e era negro sacristán, alborotaron el conv[en]to y el barri-

o de donde ocurrio gente p[ar]a resgistrar la iglesia enderesanronce a

la sacristía y haviendo descargado algunso golpes y cintarazos sobre

un bulto q[u]e vieron en una camilla p[o]r creer q[u]e era ladron des-

cubrieron alli al S[an]to Cristo y en su cuerpo las señales moradas

de los golpes q[u]e le havian dado. Pasaronlo al conv[en]to donde las re-

ligiosas los velaron en la noche, al dia sig[uien]se te entrego un dedo

q[u]e se le havia cortado, y se haveriguo q[u]e el negro sacristán p[o]r

seis p[eso]s lo havía sacado enla noche anterior p[ar]a llevarlo a un enfer-

mo q[u]e estaba en terminos de espirar, y sano prodigiosam[en]te tiene es-

ta imagen una cofradía compuesta de los mercaderes de México fun-

dada en {1698}. la qual ha sido de mucha utilidad a la iglesia

y al conv[en]to. La imagen es el guarda m[ay]or de cajones, y tiene una

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-012r.}                                                                                                       12

 

de las siete plazas dotadas á este fin p[o]r el comercio.

La iglesia de Regina se reedifico en tiempo del autor.

En esta misma iglesia hai otra imagen de N{uestr]a S[eñor]a de la Fuente, q[u]e

se determino en México p[o]r milagrosa: obra en  pintura del cele-

bre mexicano Ibarra q[u]e la pinto cinco o seis a[ño]s antes de escri-

bir el autor.

                        {Cue-Homo de Valvanera}

En una capilla interior de este monasterio estaba colocada una imagen de Cristo

q[u]e p[o]r su notable grandor y deformidad era no solam[en]te poco venerada de las

monjas. p[o]r estar rara ves se le miraba: entre ellas una pobre sorda era la {que}

unicam[en]te te havia dedicado a darle algun aceo y culto los viernes. Finalizaba

el año de {1715} q[uan]do una venerable religiosa entrando de noche a la capilla, y

dirigiendo su vista al s[eño]r lo encontro enteram[en]te renovado, sus colores mui

vivos, y su rostro hermoso, informadas y admiradas del hecho las religiosas

dieron parte al provisor y al ob[is]po. se procedio inmediatam[en]te a las averi-

guaciones y pesquizas y se concluyo no haver intervenido en el hecho dili-

gencia humana, cerrose y sellose la capilla y en todos los registros se ha-

llo alguna novedad en la imagen o una cicatriz nuevam[en]te formada,

ó algunas gostas de sangre q[u]e antes no tenia determinaron pasarlo á

la iglesia donde se le fabrico un altar, con dinero q[u}e al regreso de sus

diligencias hallo el provisor en la sala del jusgado dexando con este

fin sin haverse sabido p[o]r quien. Referian tambien las religiosas

haver notado en el tiempo de la renovación de esta imagen, frequen-

tes ruidos y golpes a los lugares inmediatos a la capilla, y dentro de ella

muchas luces,q[u]e se descubrian por los resquicios de la puerta, en una

procesión q[u]e se hizo de esta imagen p[o]r la peste del año de 37, se

notaron dos novedades renombradas: la 1ª q[u]e estando en terminos de caer

el anda q[u]e la conducia, y haviendo fixado uno de los asistentes su  /bra-

zo/ mano en el brazo del s[eño]r quedo esta impresa como en car-

ne viva, señalados los dedos y uno especialm[en]te hasta, y el brazo del s[eño]r

con cordenales, moreteado e hinchado. 2ª que las dos piernas de la ima-

gen q[u]e estaban antes juntas se desviaron una de otra, como en {gesto}

de querer hincarse, y una de las plantas q[u]e antes asentaba en el

 plano quedo acia atrás enteram[en]te descubierta. De todos estos hechos,

de q[u]e se sabe haver dado testigo el mismo  provisor, no se sabe q[u]e hayan

quedado docum[en]tos. El provisor desp[ue]s de la renovación manifesto sus re-

petos al s[eño]r con la fabrica del altar referido, y cortarle á la ima-

gen una buena capa, lo q[u]e dio al pueblo q[u]e de todo se entretiene

a decir graciosam[en]te.

                                        Con dar a la imagen capa,

                                         le dio milagro capote.

                                         imagen de Jesús Nazareno.

Pertenece a las monjas de S[a]n Lorenzo q[u]e la tienen p[o]r milagrosa

                                    Niño Jesús de la iglesia de S[a]n  Juan de la Penitencia

Fundaron este conv[en]to en 1598. A pocos a[ño]s de su fundación se presento

un indio llevando un niño Jesús a una de las religiosas g[emera]l q[u]e no pare-

cio jamas el niño era deforme y entretanto volvia el dueño se de-

termino colocarle en su iglesia en el remate de un colateral: a

pocos dias acontecio un fuerte terremoto q[u]e hiso gran daño en la

ciudad y no pequeño en esta iglesia desplomose arto de ella

q[u]e casi estrellaba sobre la cabeza del niño, y se noto q[u]e su mano

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-12v.}

 

fundaron su pretensión en haver hallado la imagen un feligres suyo

en estar fundado el santuario en su jurisdicción, y agregaban p[ar]a dar

m[ay]or merito a su demanda el q[u]e havian construido en la conquista es-

piritual de este reino. Cedio dio el virrey, y su voto y persuasiones atraxe-

ron la voluntad del cabildo a excepción del Regidor D[o]n Alonso Valdes,

q[uie]n experimentado el desaire de su resistencia, robo la imagen y la

oculto en la  iglesia catedral. Sabido el hurto p[o]r el virrey pero en  pri-

sion a Valdes amenarandolo de mayor rigor uno entregaba la i-

magen, el nego constantem[en]te el hecho manteniéndose inflexible

treinta dias, al cabo de los quales fue puesto en soltura p[o]r haver

cesado el mando de Villa Manrique, de q[uie]n se dice haver tenido un

carácter recio.

Sucedió a este D[o]n Luis Velasco el {2º} era regidor de México y se ha-

llaba en Madrid, entro p[o]r {Tamiahua}, pue{rto} de la Guasteca.

Variado el gobierno, mucho tambien el cabildo su resolución sobre la

entrega de la imagen á los franciscanos.

Ademas de este ha tenido m[ucha]s otras contestaciones la ciudad sobre la

vicaria del santuario.

En seis procesiones q[u]e huvo en el discurso de {32} a[ño]s estos es desde el de

{1663}, hasta el de {685} cargaron a la imagen los p[rinci]p[ale]s de S[a]n Diego qui-

tose esta practica p[o]r la ciudad y se le hiso a la imagen una carro-

za.

El P[adre] Pareja autor de una crónica manuscrita de la pro[vinci]a de la Mereced de

México, siguiendo al P[adr]e Cisneros, dice q[u]e la imag[e]n de Remedios, fue de la

Merced, y q[u]e el P[adre]  Fr[ay] Bartolomé de Amedo la coloco en la capilla q[u]e se hi-

so de or[de]n  de Cortes en el templo de {Huitzilopostli}, donde celebro y pre-

dijo v[aria]s veces el dicho p[adr]e cuia muerte, y no haverse fundado el or[de]n en Mé-

xico cinco m[i]l a[ño]s desp[ue]s. hiso olvidar este suceso.

Los novenarios intentaron fundar su recoleccion cerca del santua-

rio de Remedios. p[ar]a lo qual intentaron al visitador g[ene]ral del reino

D[o]n Francisco de Garzaron, p[ue]s la ciudad se desentendio de esta su-

plica.

Esta imagen de Remedios es la verdadera conquistadora de México

y no cvomo algunos han querido la imagen de la S[anti]s[i]ma Virgen q[u]e se ve-

nera en la iglesia de los franciscanos de Puebla.

La ciudad de la Puebla se fundo á los 9 a[ño]s de conquistado Méxi-

co: esto es el año de {1530} el dia de S[an]to Toribio {16} de abril.

Los franciscanos vinieron a México tres a[ño]s despues de conquistada:

esto es el de {1524}..

En el mismo lugar de Otomcapulco donde se encontró la imagen en

la vispera y dia de S[a]n Hipólito se veian m[ucha]s luces y resplandores, se di-

visaban  gallardetes, flamulas, se veia sembrado el suelo de juncia,

(lo q[u]e hacen en sus fiestas los indios) se oian musicas, chirimias, trom-

petas, y se divisaba un templo a medio hacer. Vio primeram[en]te este

hecho un negro, presenciaronlo desp[ue]s sus amos y ultimam[en]te toda la

camara, q[u]e acostumbraba tomar esta dirección en los dias referi-

dos, y la qual testifico el suceso.

Esta imagen se trahe a México provisionalm[en]te en las necesidades

publicas, como sequedades ó pestilencias. Van p[o]r ellas dos eclesiásticos

del coro, q[u]e la reciben con el juram[en]to de volverla se le traher

en una carroza, de la q[u}e es el cochero un personage distinguido

q[u}e lo ha sabido ser el Conde S[a]ntiago, y se le coloca en la  iglesia de

Veracruz, donde ocurren p[o]r ella el virrey con todos los tribunales, y

el arzobispo con las religiones. Hasta el año de {1737} se ha-

via conducido veinte y seis v[ece]s haviendose notado siempre los ....

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-013r.}                                                                                                     13

 

calos prontam[men]te con la mas lista p[o]r la mas inútil diligencia colocado

ya en el noviciado, se admitio una noche del año de {1550}, q[u]e salia

del noviciado un incendio q[u]e amenazaba a todo el conv[en]to. Parten los

religiosos al registro y encuentran la imagen llena de resplandores por

inmovible pasaron en esta observación hasta la hora de martires,

en q[u]e ceso el incendio concluido estos reaparecieron nuevam[en]te sobre el

mismo noviciado los mismos globos de luz q[u]e se notaron al principio,

los quales se conocio, q[u]e permanecían entretanto los novicios velaban

en oración al S[an]to Cristo. Era mui devoto de esta imagen  el virrey D[o]n

Luis de Velasco. el 1º  y con ester motivo en la pestilencia q[u]e p[o]r una gran

sequedad no sufrio en /16/{1563} la N{uev]a E]spañ]a se la saco en procesión, despues

de la qual fueron copiosísimas las lluvias y el socorro.

Imagen de N[uestr]a S[eñor]a de Consolación en la iglesia de S[a]n Cosme.

Pertenecia esta imagen a un vecino del barrio de {Tlaxilpan} a q[uie]n se le

cayo una hija en un poso donde estaba a punto de ahogarse. La madre

angustiada no tuvo otro recurso q[u]e tomar prontam[en]te la imagen y co-

locarla al brocal donde le dirigia sus muy ardientes suplicas levantan-

do las aguas hasta al brocal y la imagen tiene el /brillo/ p[ar]a sacar

a la niña entera y sana. Quedo desde entonces la imagen en esta

misma postura. Los dueños dedeseosos de colocarla en p[ar]te donde tuvie-

se culto y exitando contestaiones de algunas iglesias hecharo suertes

la q[u]e cayo sobre S[a]n Cosme: estando entonando la salbe sus religiosos de-

masiadam[en]te inflamados en {el: ellos tuos misericordes ozulos ad my comverte}

volvio la imagen los ojos a la comunidad teniéndolos hasta aho-

ra en esta aptitud. Se le llama tambien a esta imagen N[uestr]a S[eñor]a del

Valle p[o]r devoción del  marques de este titulo.

                                               C[apitulo]11.

En la iglesia de S[a]n  Agustín esta fundada una cofradía con el titu-

lo de S[a]n Nicolas de Tolentino.

                        {S[an]to Cristo de Totolapan}

P[o]r el año de {1543} era prior en este pueblo el penitentisimo s[eño]r Anto-

nio de Roa Agustiano, de venta este un s[an]to Cristo y lo obtuvo p[o]r medio

de un indio, q[u]e se presnetó con el y desparacecio de la  misma ma-

nera q[u]e los q[u]e indujeron el {de} S[an]to Domingo. Esta imagen paso a Méxi-

co, y se venera en una capilla de la iglesia de S[a]n Agustin.

En Tiempo /del/ autor estaba recien fundado el colegio de S{a]n Fernan-

do de {Propaganda}.

                                                       C[apitulo]10.

Colegio S[a]n Pedro Pascual el de Beltrán.

El Cov[en]to de la Merced de México se fundó en {1595} p[o]r Fr[ay] Fran[cis]co

de Vera, Vicario Pr[incip]al de N[uev]a Esp[añ]a y desp[ue}s Ob[is]po de Perpinar. Este havien-

do pasado a Guatemala, donde ya estaba fundada la pro[vinci]a encon-

tro dos imágenes de N[uestr]a  /Esp[añ]a/ Madre mui parecidas y prefectas, des-

tinaba una p[ar]a el conv[en]to de México, p[ar]a aquellos religiosos determi-

nados á embarcarlo, lo obligaron, á q[u]e pusiese el cajon en q[u}e es-

taba encerrada la imagen en una muda, abandonándola á la

suerte, y sobre el caxon este rotulo: {quien te encaminare

a México Dios lo encamina}. La imagen llego el año sig[uien]te a

México conducida de iunos indios de {Cuitlahuac}, q[u]e la havian

recivido de otros, y es la misma q[u]e se venera en n[uest]ra iglesia.

                                    C[apitulo]12.

Monaterio de la Concepción fundado en México en 1542 seg[u]n

Siguensa, o en {1530} según Betancurt, las quatro primeras

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-013v.}

 

monjas profesaron en manos del s[eño]r Zumarraga.

El Monatesrio de Jesús Maria venera en su iglesia algunas

imágenes milagrosas: la de Jesús con la cruz a cuestas, la del

ace-homo, la del S[ant]o Cristo: de cada una de las quales represen-

ta algun portento, y de ellas habla Siguenza: la del niño

Jesús: la de N[uestr]a S[eñor]a de las Aguas.

Esta ultima imagen es de una Virgen Dolorosa, tomo este titulo p[o]r

haver librado ella a un devoto suyo de un naufragio, y se le confir-

mó en {1714} p[o]r q[u]e en una amenaza de inundación q[u]e tuvo

México se le encontro mojada, sin q[u]e alguna diligencia hu-

mana huviera bastado a secarla, y sin haverse podido saber

q[uan]do se /cree/ seco. se cree q[u]e los indios la vieron sobre las aguas, p[o]r q[u]e

pocos dias antes de advertirse este crucero ocurrieron en vanda-

das a este monasterio. poniendo en movim[ien]to de sus religiosas

y a todo el vecindario, pregonando, q[u]e venian a hacer cantar

una misa a la virgen q[u]e se havia mojado, y andado sobre las

aguas. de todo esto se hiso información en el dicho año.

                                     C[apitulo] 13.

La celebre M[adre] Juana Ines de la Cruz (alias la monja de

México) florecio en el monasterio de S[a]n Gregorio, mom{ento}

de la pestilencia de {1695} en dom{ingo} 17 de abril.

En {una}la capilla de este monasterio formada en un sótano se vene-

ra una imagen de N[uestr]a S{eñor]a de Guadalupe pintada al temple en u-

na parede desde tiempo inmemorial, y concervada a pesar de la

mucha humedad del lugar, y la abundancia de nitro. Se ha adver-

tido q[u]e la imagen q[u]e antes estaba a un lado de la pared y como

á un rincon de la capilla se ha ido colocando perfectam[en]te

al medio, sin q[u]e  en ello pueda intervenir diligencia humana.

Las religiosas le dan mucho culto, la veneran como milagrosa

y se le tiene con bastante, siguiera teniendo entre otras lampa-

ras y alhajas, una de cincuernta marcos.

Reconocim[ien]to voluntario de niñas de S[a]n Miguel de Bethlem

fundado p[o]r el V[enerable] Clerigo D[o]n Domingo de Barcia dexolo bajo

el amparo de la Divina Providencia: recayó el patronato en la

mitra: el s[eño]r Visaron fue mui favorable a esta casa. Pasan

de trecientas las mas v[ece]s {,} las niñas q[u]e se mantienen en él: la cuido

de su propio sostiene {33} con mesada q[u]e dá de {100} p[eso]s este

colegio se conoce en México con el nombre de las {Mochas}.

 

 

 

 

 

 

 

{283-014r.}                                                                                                14

 

 

                                          Lib[ro] 3. C[apitulo] 4.

En {1575} apenas tenian en México los jesuitas tres a[ño]s.

Distinguiose en esta peste la caridad de los jesuitas q[u]e no solo asistian

sin descanso en el auxilio espiritual á los enfermos, sino q[u}e recogían

tambien limosnas del publico, y contribuian con sus rentas.

Compilo en el celo y caridad con los apestados el colegio de S{a]n Fernando

recien fundado entonces. El legajo q[u]e {sirvio} p[ar]a  esta fundación estuvo

destinado P[ar}a la del or[de]n de S[a]n Cayetano.

                                           C[aptulo] 2

Veintiuno a[ño]s antes de la conquista de México sirvieron a la América con

el P[adre] Benedictino Fr[ay] Bauil, nuncio apostolico doce clerigos doctos y ex

pertos seg[u]n Torquemada y Padilla. Se cree q[u]e fue como de estos D[o]n Bartolo-

me de las Casas o Casaus. Trabajó de clerigo {20} a[ño]s en América, pasó a

España en 1515  sin haver logrado el despacho q[u]e deseaba p[o]r la muerte

del Rey D[o]n Fernando: volvio á continuar su ministerio en la isla de

S[an]to Domingo, tomó desp[ue]s el habito de esta religion, estudio en ella en

México teología y seg[u]n Oviedo fué el primero q[u]e se ordenó en Ame-

rica en la isla Española.

Parece pertenecer tambien á este numero el Diacono Jerónimo de A-

guilar, entró a la N[uev]a Esp[añ]a nueve a[ño]s antes q[u]e Cortes, se instruyó en la

lengua, y le sirvio de interprete.

El presbitero Juan Dias, Capellan de Cortes, murió mucho desp[ue]s de

la conquista en un asalto q[u]e dieron á los españoles los indios de {A-

cholac Quecholac} q[uand]o se disculparon con no haverlo conocido p[o]r

su traje. Este bautizo á los quatro s[eñore]s de Tlaxcala, y otros de México y

{Texcoco}. Fue seg[u]n Torquemada el primer apóstol de México, y el

1º q[u]e hiso oficio de cura y pastor.

El Lic[enciado] Juan de Leon, q[u]e seg[u]n Grijalva vino con Garai y seg[u]n Tor-

quemada asistio en el exercito de Pamplitu y contradijo la pri-

sion de Juan Velásquez, embiado de Cortes.

Lic[enciado] Juan Ruis de Guevara, vino con Navarra; y trato de unir

su exercito con el de Cortes p[ar]a facilitar la conquista.

Estaban p[ue]s en este tiempo fuera de Fr[ay] Bartolomé de Olmedo

los quatro clerigos Aguilar, Leon, Diaz y Ruiz de Guevara. Agre-

gan algunos á este num[ero] á Alonso Gonzales, q[u]e vino con Francis-

co Hernández de Cordova al descubrim[ien]to del Yucatán.

Es tambien de esta antigüedad el B[achille]r Pedro de Villagra, q[uie]n en {1523}.

p[o]r nombram[ien]to del emperad[o]r sucedió en el curato a Juan Dias.

El B[achille]r Bustamente, q[uie]n en el año de {1531} enseñaba gramática en el conv[en]to

de S[an]to Domingo, el q[u]e seg[u]n el s[eño]r Padilla, le debio el adelantam[ien]to en sus

estudios.

El Maestro Alonso Gutierrez, v[ecin]o de Salamanca, catedrático, n[om]bro y ayo

de los hijos del duque del infartado clerigo, mui docto leyo artes

y, teología á los agustinos, y /resolver/ sirvio p[ar]a resolver las difíciles ques-

tiones q[u]e ocurrieron en estos tiempos tomo desp[ue]s el habito de los agus-

tinos á instancias de su director S[a]n Francisco de la Cruz, fundador

de esta or[de]n  en México.

D[o]n Cristoval de Lugo, clerigo santo y docto, entró en S[an]to Domin-

go donde tomó el nombre de Fr[ay] Cristoval de la Cruz.

Lic[enciado] D[o]n Francisco Gomes, Paje y Sec[retari]o del s[eño]r Zumarraga, desp[ue]s del

Virrey Mendoza, y últimamente religioso Francisco, cuia croni-

ca escribio.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-014v.}

{Hoja reproducida al reves y totalmente ilegible, o es una hoja en blanco en donde se calcó otra}

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-015r.}                                                                                               15

 

D[o]n Francisco de Leon, primer Avuediano de la Puebla.

D[o]n Alonso Ximenez, Sacristán y uno de los primeros racioneros de

la iglesia de México.

D[o]n Cristobaval de Leon B[achille]r y Catedrático.

D[o]n Luis Velásquez, Canónigo de México, Estos quatro toma-

ron el habito en S[a]n Francisco.

La religión de la caridad la fundó el siervo de Dios Bernar-

dino Alvaron, ayudado de otros clerigos y presbiteros como Do-

mingo de Ibarra y otros: {Ill[ustrisi]mo Arce} lib[ro] 1 C[apitulo] 19.

Lic[encia]do Bartolomé de Zaldaña evillano y de los primeros pobladores

obtuvo v[ario]s beneficios, y entre ellos el curato de S[an]ta Catalina Martir.

Lic[encia]do D[o]n Juan de Tobar, Racionero de México, Sec[retari]o de su cabildo, y

dixeron mexicano.

S[eño]r D[o]n  Alonso Fernández de Segura Visit[ado]r del arzob[is]po provisor de

indios, cura de {Iatlahuaca}, estos tres pasaron a la compañía, a-

guardaron mucho a la propagación de este instituto.

Fuera de estos havia otros q[u]e hacian una vida retirada y apos-

tolica, como el

venerable Juan Gonzales.

El P[adre] Juan de Mesa Apóstol de la Guasteca, y su compañero

el Lic{enciado] Luis Gomes.

El P[adre] Urbano, nombre apostolico, según  Fr[ay] Gerónimo de Mendieta,

/apad Herrera/.

El V[enerable] Juan Sánchez de Alanis redujo a fé á los otomies, q[u]e espan-

tados de la guerra de México se havian retirado a Queretaro.

Fueron tambien respetables p[o]r estos tiempos los nombres de

D[o]n Fernando de Bocanegra, Subdiacono.

D[o]n Francisco de Lona, mexicano.

El Lic[enciado] Pedro de la Mota, gran director de almas.

El B[achille]r Matias Games mui penitente, a q[u]e es deudor de la

or[de]n de terceros de S[a]n Francisco de su extensión, antig[u]a fabrica , y exer-

cicios.

El B[achille]r Man[ue]l Telles, de los primeros directores y capellanes de los

carmelitas en cuia or[de]n profeso desp[ue}s.

Cabrera dice haverse averiguado q[u]e la M[adr]e de S[a]n Felipe de Jesús fue mila-

grosa y añade haver nacido este s[an]to en el lugar donde estaba en su tiem-

po {templo del} el oratorio de S[a]n Felipe Neri en las fiestas de la beatificación

de S[a]n Felipe salio su m[adr]e en procesión bajo de palio.

                                                      C[apitulo] 3

Los empleados en la moneda de México costean la fiesta, y formen-

tan el cultyo de N{uestr]a S[eñor]a de la Purísima en a iglesia de S[an]ta Ines.

Congregación de S[a]n Jose en la iglesia de S[an]ta Ines fundada en el tiem-

po en q[u]e escribia el autor.

                                                  c[apitulo] 4.

El Conde S[a]ntiago tiraba por este tiempo el coche del S[anti]s[i]mo y promovio

 

 

la congregación de cocheros bajo de ciertas  constituciones q[u]e p[o]r en-

tonces no tuvo efecto.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-015v.}

 

Parroquia de S[an]ta Catalina martir una de las mas antiguas de México te-

nía antes demasiada extensión, y la asistian dos curas, p[o}r el año de {1655}

dividiose en dos. En este año  hiso informe al rei el acuerdo sobre

la necesidad q[u]e tenía México de m[ayo]r num[er]o de parroquias. La de

S[an]ta Catalina, en el año de {37} apenas contaba en su padrón 2.in-

dividuos. A mas de la división contribuyo a disminuirla de inun-

dacion de {1629} en la q[u]e las {salobres} aguas, de la laguna de Texcoco hicieron

casi inhabitable  su territorio.

Imagen  de C[ris]pto  en la en la columna de la Parroquia de S[an]ta  Catalina Martir.

Esta imagen se cree milagrosa y la tradición conserva la sig[uien]te historia en

una procesión de penitencia q[u]e salia todos los a[ño]s .de esta iglesia se anuncia á

los indios de  S[an]tiago Tlatelolco p[ar]a un paso del s[eño]r en la  columna q[u]e los

indios presentaban  con suma desconfianza, no permitiendo q[u]e entrase

á la iglesia, ni a la /.../ {sali}da, ni a ... en uno de estos a[ño]s  salio la

imagen y contra lo acostumbrado en los indios quedo enla iglesia p[ar]a

dos dias, al cabo de los quales reconvenidos estos  p[ar]a  q[u]e la condujeren

desp[ue]s  de varias  contestaciones aseguraron no haverla prestado aquel

año, en pruebla de lo qual la mostraron. Parose desp[ue]s a averigua-

ar el origen de la otra imagen, y solo se pudo saber q[u]e quatro

hombres en traje de penitencia y con las caras encubiertas la reci-

vian conducido aquel dia, y dexadola en la iglesia, sin q[u]e se su-

piere de ellos. A esta imagen se le pusieron dos sayones á los lados, re-

presentados con la m[ay]or fiereza, desp[ue]s de lo qual se dice haverse oido fre-

quentem[en]te en la iglesia, latigo y quejidos, y ayes, q[u]e procedian del nicho

en q[u]e estaba pusieronle desp[ue]s en un lugar dos hermanos angeles.

Los primeros fundadores exigieron una capilla a S[an]ta Catalina Martir,

la qual en 1538 p[o]r cedula de la emperatriz tomó el nombre de parro-

qui en compañía del sagrario; y Vera-cruz, al cabo de siglo y me-

{penso

en}

dio se aumentó el numero hasta seis sin la del sagrario, siendo a-

nexas las iglesias de S[a]n Martín en la feligresía de S[an]tiago de la S{anti]s[i]ma

Trinidad, la de S[an]ta Maria de Gracia, hoy S[a]n Jose y la de S[a]n Antonio Abad

p[ue}s quedaron establecidas solas quatro, y la de S[a]n Miguel anexo del

sagrario.

                                         C[apitulo] 6.

México en la antigüedad se dividia en quatro barrios, cabeceras, ó

quarteles, nombrados: {Moyotla, Teopan, Cuepopan, y Alzacualco}, los q[u]e

no tomaron desp[ue]s el nombre de quatro iglesias q[u]e p[o]r el mismo año

son S[a]n Juan, S[a]n Pablo, S[an]ta María, S[a]n Sebastián.

La parroquia de S[a]n José comprendia en sus principios estos quatro ba-

rrios, hoi en dia comprende solo el q[u]e se llama Mayoteca o S[a]n Juan de

la Penitencia, p[o]r el conv[en]to de monjas de este nombre q[u]e tiene en su

recinto: obrara veinte barrios, con once hermitas ó capillas, en

otras cinco de visitas q[u]e tiene fuera de la ciudad, y otros tantos pueblos,

ó como llaman asistencias. Esta parroquia es antiquísima, ó la pri-

mera de México: era templo y conv[en]to de S[a]n Francisco, fue iglesia

catedral p[o]r privilegio de Carlos V. y Felipe 2, se celebro en ella

el primer concilio o sínodo provincial mexicano, se juro en ella

a S[a]n José p[o]r patrono pr[incip]al de N[uev]a Españ]a, se celebraron tambien al-

gunos autos de fé y exequias de reyes y principes.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{283-016r.}                                                                                     16

 

El barrio de {Tlatelolco}, se llamaba en la antigüedad {Xaltelol-

co}, esto es {monton de arena}. El templo de esta parroquia se

tiene p[o]r milagro del arte y su penitencia es maravillosa en-

tre los edificios de México, esta dedicada al Apóstol S[an]tiago y se

mandó edificar p[o]r Felipe 2. en cedula de 3 de mayo de {1543}.

Está en esta parroquia el Colegio de S[a]n Buenaventura de reli-

giosos franciscanos y antes el de S[an]ta Cruz fundado p[o]r D[o]n Anto-

nio Mendoza p[ar]a niños caciques, el qual está hoy arruina-

do. tiene esta parroquia seis parcialidades, casi {20} barrios se-

ñalados con sus hermitas y cinco pueblos de visita.

Entre los indios de S[an]tiago Tlatelolco, y los del barrio de S[an]ta Ma-

ria la Redonda, alias de {Tlaquechchiucan} havia una enemistad

mui antigua, q[u]e se explicaba frequentem[en]te p[o]r guerras de pie-

dras, q[u]e se llevaron m[a]s v[ece]s de encuentro á los ministros de jus-

ticia, q[u]e intentaban reprimirlos. trabajó mucho en extinguir

este mal el famoso Capitan D[o]n José Velásquez, terror

de los forajidos de México, y puso la ultima á esta dis-

cordia la plaga del año de 37.

Imagen de S[an]ta Maria la Redonda.

Se cree q[u]e este nombre se le dio á esta imagen p[o]r la figura

de su antiguo ........ella es de la estatura de una mujer,

y representa á la virgen en su asunción: la cabeza y manos

se remitieron de Europa p[o]r un comisario de S[a]n Francisco y la

fabrica del resto de un cuerpo se cree milagrosa p[o]r haver

desaparecido los artífices. huvo mucha veneración en Mé-

xico esta imagen en el siglo pasado, en el qual se sacaban

de ella infinitas copias en pinturas y medallas: en el año de

{1670}; se sacó p[o]r falta de aguas haviendo limitado el ordi-

nario su procesión á cierto; la lluvia fue copiosísima en

este lugar, quedandoseco el resto de México. sacose tam-

bien p[o]r un incendio en {1676}. el q[u]e dicen q[u]e se apegó á su

vista. en el de {1696}  sacose en publico con la m[ay]or solemni-

dad p[o]r una seca y epidemia, y se logro el mejor efecto.

En {1676,}, incendiose el Templo de S[a]n agustin, liquidándose

todo el plomo de su techumbre.

 

 

 

 

 

 

 

Blanca Lilia Alvarez Torres

 

Armando Santiago Sánchez